El Tambo (Ecuador), 16 mar.- El Gobierno de Ecuador dijo hoy que es ilegal la instalación en Guayaquil de un monumento al expresidente León Febres Cordero, de derecha, en medio de una polémica sobre el tema.
El municipio de la ciudad costera, la más poblada del país, había intentado poner en una plaza en un barrio patrimonial un busto gigante del exmandatario, obra del escultor español Víctor Ochoa, pero la pieza se encuentra retenida en la aduana tras una demanda en contra de su colocación.
En respuesta, el jueves en una operación por sorpresa supervisada por el propio alcalde, Jaime Nebot, que es de derecha, el municipio montó un nuevo monumento a Febres Cordero compuesto por dos prismas de la misma altura que el busto, el cual era resguardado hoy por policías municipales.
"Definitivamente es ilegal, y yo creo que el municipio lo sabe, por eso prepararon el escenario durante toda la noche, a oscuras, con el apoyo de 400 policías municipales", dijo hoy a la prensa la Ministra Coordinadora de Patrimonio, María Fernanda Espinosa, durante un acto en la localidad andina de El Tambo.
"Solo dejaron la instalación final para la mañana y eso estuvo acompañado además de una marcha política", explicó.
Espinosa dijo que el Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC) seguirá un proceso legal contra la colocación del monumento.
La ministra sostiene que esa entidad tiene la última palabra sobre las zonas declaradas patrimoniales, como el barrio Las Peñas de Guayaquil, que es el área de disputa.
Espinosa mantiene que una instalación de 5 metros de altura, que es el tamaño del busto y del nuevo monumento, rompe la armonía visual y arquitectónica de la zona, y ha insistido en que se puede colocar en cualquier otra parte de Guayaquil que no sea área patrimonial.
En cambio, los partidarios del municipio argumentan que la prohibición tiene un trasfondo político y que se debe a que el Gobierno del presidente Rafael Correa es de izquierda.
El exdiputado Alfonso Harb, uno de los amigos más cercanos y correligionario de Febres Cordero, ha afirmado que se trata de "una reacción de odio y persecución contra la memoria" del expresidente.
Febres Cordero, quien nació en Guayaquil, ocupó el cargo de alcalde de la ciudad y murió en 2008, fue uno de los políticos más influyentes de Ecuador de las últimas décadas y, a la vez, de los más controvertidos.
Gobernó Ecuador entre 1984 y 1988, y durante su mandato hubo denuncias de violaciones a los derechos humanos.
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