Investigadores no descartan que Tello de Castilla muriera de forma violenta

Palencia, 27 dic.- Un equipo multidisciplinar que ha investigado los restos mortales de Don Tello de Castilla (1337-1370), enterrados en Palencia, no descarta que muriera de forma violenta, al parecer tras sufrir una herida en el cráneo, según ha informado hoy el historiador Marcial Castro Sánchez.

Este, junto con el doctor Manuel García Urbón, radiólogo del Hospital Río Carrión de Palencia, han presentado hoy en el Centro Cultural Provincial algunas de las conclusiones alcanzadas tras analizar los restos del hijo de Alfonso XI El Justiciero y de Leonor de Guzmán, exhumados en julio de este año en la iglesia de San Francisco de la capital palentina.

Marcial Castro y Manuel García han señalado a los periodistas antes de ofrecer una conferencia que no se descarta que Don Tello de Castilla, último señor de Vizcaya, hubiera muerto de forma violenta por "una herida en forma de golpe que aparece en la zona superior del cráneo y que se llevo a cabo en 'perimórtem'", ha señalado Castro.

"No podemos afirmar con certeza que muriera de forma violenta, pero hemos abierto una segunda línea de investigación porque, de confirmarse plenamente, supondría rebatir o retocar los textos históricos sobre esta figura, además de su testamento", ha apuntado Marcial Castro.

García Urbón ha explicado que en las pruebas radiológicas practicadas a los restos de Don Tello de Castilla, "aparece claramente una fractura longitudinal en hueso fresco, lo que indica que se produjo antes de su muerte o en ese mismo instante, pero nunca después".

Asimismo, Marcial Castro ha apuntado que los restos analizados, tras efectuar los pertinentes estudios antropológicos, edafológicos, entomológicos y paleotextiles, pertenecen a un varón que medía entre 1,62 y 1,66 metros de altura que contaba entre 26 y 35 años de edad, "lo que ratifica, según los datos, de que se trata de Don Tello de Castilla".

Además, Marcial Castro ha confirmado que los restos de un bebé localizados en la tumba del noble castellano pertenecen a un niño que vivió entre los siglos XVIII y XIX, "es decir, que alguien los puso en la tumba siglos después de la muerte de Don Tello".

El historiador ha concretado que se ha podido establecer una prueba de ADN mitocondrial y se ha aislado el cromosoma Y, "por lo que podemos compararlo con cualquier descendiente de la casa de los Borgoña o Trastámara".

En la sacristía de la Iglesia de San Francisco reposan los restos mortales de don Tello de Castilla (1337-1370), hallados en 1978 con motivo de unas obras en el Altar Mayor.

Su enterramiento presenta ciertas similitudes con el de Cristóbal Colón en el ya desaparecido convento de San Francisco de Valladolid. Ambas figuras, según explica el historiador Marcial Castro Sánchez, fueron veladas y enterradas con el hábito de San Francisco cubriendo ricos tejidos.

Marcial Castro Sánchez es el responsable histórico de la identificación genética de Cristóbal Colón y le ha acompañado también en esta iniciativa José Antonio Lorente Acosta, responsable científico de la misma.

Tello Alfonso de Castilla, nacido en la ciudad de Mérida en el mes de junio de 1337, fue el sexto de los diez hijos extramatrimoniales de Alfonso XI de Castilla y de Leonor de Guzmán.