Sanlúcar de Barrameda (Cádiz).- El torero jerezano desplegó su tauromaquia y sus ganas en una tarde de mucha emoción.
Se lidiaron toros de distintas ganaderías y de diferentes hechuras y juego. El primero de Miura, devuelto por inválido, primero(bis) Salvador Domecq, pastueño; segundo Salvador Domecq, noble; 3º Victorino Martín, encastado y picante; cuarto Fuente Ymbro, desclasado y rajado; quinto Torrestrella, con movilidad; sexto Gavira blando.
Juan José Padilla, oreja, dos orejas, dos orejas, dos orejas, oreja y oreja.
Una tarde emocionante, donde Juan José Padilla desplegó toda su tauromaquia. Un forma de estar en la plaza, en torero, y que gustó mucho al público. Estuvo espectacular en todos los toros con las banderillas.
Asimismo, construyó faenas de gran calado. Destacar la del segundo toro, donde toreó templado y con mucho gusto por el pitón izquierdo. En el quinto, muleteó con la montera puesta, con una muleta blanca y sentado en una silla de enea. Con el capote hizo quites distintos en cada toro y toreó el quinto a la verónica con enjundia y buen gusto.
Media entrada en tarde calurosa.
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