Biedma asegura que la literatura que se está haciendo en España "no es bastante valiente" a la hora de afrontar ciertos temas, como la demencia, las enfermedades terminales o las conductas suicidas, censuradas en ciertos casos por algunas editoriales.
"Tengo testimonios directos de editores que me dice que temáticas como la locura, el cáncer o el suicidio que son temas que resultan como veneno para la taquilla, que es mejor no utilizar, que es mejor que no aparezcan, que es mejor ocultar de cualquier manera", dice el escritor sevillano.
Biedma explica que, por este motivo, "estamos consiguiendo una literatura superficial", que no se adentra en las cuestiones que interesan y afectan a los lectores, con lo que los escritores, en su opinión, se están quedando a medio camino de la verdadera función social que deberían tener los novelistas. Sobre la locura, el escritor considera que, si bien los manicomios se han abolido, y que ahora "las calles son el nuevo manicomio". Biedma afirma que, en la actualidad, el carácter de las personas no es muy distinto al comportamiento de aquellos enfermos recluidos en instituciones psiquiátricas.
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