Valencia.- La falta de acierto con la espada ha impedido hoy a José María Manzanares abrir la puerta grande de la plaza de Valencia, que sigue intacta en el presente ciclo de Fallas, a pesar de la gran faena que cuajó al quinto, un animal sin demasiado fuelle con el que el alicantino logró acoplarse.
También José Antonio Morante perdió al menos un trofeo por no manejar bien el acero con el que abrió plaza, ejemplar que no duró demasiado pero al que toreó con gusto, dejando detalles de gran pureza y profundidad.
La expectación creada por el cartel de "artistas" que se anunciaba hoy se aguó por el escaso juego de las reses de Núñez del Cuvillo, muy justas de presentación y fuerza, especialmente las que correspondieron a Daniel Luque, que se las vio con el peor lote.
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