Descanso playero a la sombra del Fib Art

  • Benicàssim (Castellón).- Miles de fibers británicos ávidos de calor han tomado hoy las playas de Benicàssim con la esperanza de encontrar un soplo de aire fresco y una sombra donde guarecerse de las altas temperaturas, y algunos de ellos la han hallado en las arquitecturas efímeras del FibArt instaladas en la playa del Voramar.

"La Roja" colorea el FIB
"La Roja" colorea el FIB

Benicàssim (Castellón).- Miles de fibers británicos ávidos de calor han tomado hoy las playas de Benicàssim con la esperanza de encontrar un soplo de aire fresco y una sombra donde guarecerse de las altas temperaturas, y algunos de ellos la han hallado en las arquitecturas efímeras del FibArt instaladas en la playa del Voramar.

Las cinco edificaciones al aire libre que pueblan la arena han servido de refugio a algunos de los miles de fibers que, a media mañana, han optado por abandonar el recinto de acampada y dirigirse a la orilla del mar, ese lugar que se convierte en idílico cuando la brisa ayuda a sobrellevar las altas temperaturas a las que, para colmo, los británicos, considerados dueños del festival, no están acostumbrados.

El punto de observación levantado a modo de columpios de varias alturas y creado por la artista María José Climent ha sido el enclave que ha aprovechado el australiano Tristian Dankin para descansar, comer y reponer fuerzas antes de enfrentarse a la segunda jornada de conciertos del Festival Internacional de Benicàssim.

"Era imposible estar dentro de la tienda de campaña, así es que bien temprano nos hemos venido a la playa", comentaba este joven australiano que ayer pisó por primera vez Benicàssim, un lugar donde, dice, quiere regresar el año que viene.

A poco más de doscientos metros, otro grupo de fibers se ha recostado a la sombra de los "Tubos" con los que el estudio de arquitectos CR3AM busca concienciar de la necesidad de frenar el cambio climático, para lo que ha señalizado la altura del nivel del mar prevista para las próximas cinco décadas.

Y aunque la sombra de los árboles del paseo marítimo ha sido la más codiciada, otros fibers han optado por guarecerse bajo la obra de Judas Arrieta (un autorretrato de cinco metros de altura que mezcla la imagen de su autor con la de su héroe de la infancia, Mazinger Z) o en la propuesta de Conceptuarte, un solarium dentro del solarium de la playa, con un área de césped natural y de sombra.

El recorrido por la galería playera del FibArt 2010 lo completa "Kissing Bench", un banco con el que el colectivo Atakontu ha buscado construir el espacio perfecto para darse un beso en un paréntesis entre concierto y concierto.

Pero descansar en la playa tiene sus consecuencias, y, ante tanto fiber "confiado" durmiendo en la arena, los socorristas han visto cómo en estos dos últimos días han aumentado considerablemente las atenciones por lipotimias y golpes de calor.

Juan Pablo Pupla, de Cruz Roja, comenta que hay fibers de todo tipo, y que entre los que no se acuestan, los madrugadores y los que duermen "directamente" junto al mar, a las once de la mañana la costa de Benicàssim ya estaba repleta.

Tras el descanso matinal, con la tarde llega el momento de cambiar el tímido sonido de las olas de la Costa de Azahar por la música de los conciertos programados para la segunda jornada del FIB. Y así hasta mañana. Y vuelta a empezar.

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