Las catedrales dan respuesta a un presente convulso

  • En los últimos diez años la literatura y el cine han contribuido de forma notable a un nuevo resurgir de las catedrales, unos edificios icónicos del pasado que, en épocas convulsas como la actual, ofrecen respuestas a preguntas del presente.

Concha Carrón

Madrid, 15 oct.- En los últimos diez años la literatura y el cine han contribuido de forma notable a un nuevo resurgir de las catedrales, unos edificios icónicos del pasado que, en épocas convulsas como la actual, ofrecen respuestas a preguntas del presente.

El catedrático de Historia Medieval José Luis Corral (Daroca, Zaragoza, 1957) así lo cree, y asegura que tanto en épocas de crecimiento como en momentos de recesión las catedrales han sido referencia "de misterio, de ensoñación" que despiertan en el hombre "curiosidad por obras de otro tiempo".

En "El enigma de las catedrales" (Planeta), José Luis Corral no achaca, sin embargo, ese renacimiento de los templos góticos a un sentimiento religioso, sino a una búsqueda de los orígenes del hombre, de su pasado como forma de entender el presente, explica en una entrevista con Efe.

La pasión de este medievalista por las catedrales viene de lejos, cuando con solo 9 años visitó la de Burgos y se quedó "fascinado" por estos edificios religiosos que surgieron en el siglo XII en París, con la construcción de Saint-Denis, en 1136, y se extendieron a lo largo de los siglos siguientes por toda Europa.

Para este experto en arquitectura gótica, autor de una treintena de ensayos y libros de investigación histórica, en España se presume mucho de patrimonio histórico pero no se tienen "muchos reparos" en destruir parte del mismo para construir equipamientos modernos.

Así cita, como ejemplo, la destrucción en la plaza del Castillo de Pamplona de restos neolíticos, tumbas y la propia muralla romana para construir un aparcamiento, y precisa que en España se conocen las grandes obras, como las catedrales de Burgos, León o Santiago pero se tiene "un déficit tremendo de su historia y su pasado; por eso no se valora", puntualiza.

Corral, profesor en la Universidad de Zaragoza, reconoce que el desconocimiento que aprecia en los jóvenes en esta materia le tiene "bastante descorazonado", aunque apunta que ellos "hacen lo que ven", y lamenta que solo les lleguen mensajes de que "a Messi le duele la rodilla o que Cristiano Ronaldo está triste, cosas absolutamente insustanciales".

"La clase política está interesada en que la gente sea estúpida, que no piense y solo se dedique a lo banal", pero advierte que "lo banal nunca es trascendente".

José Luis Corral, que ha visitado más del 80 por ciento de las catedrales góticas de Europa, destaca "sin duda" por su originalidad y su "autenticidad" la catedral francesa de Chartres, una de las que ha sufrido menos deterioro a lo largo de la historia.

En España, este historiador elige la de León por su "unidad de estilo y su coherencia, obra de un solo artista, el maestro Enrique, mientras que del otro lado del Atlántico elige la de San Patricio en Nueva York, construida en 1900.

Tras las elegantes paredes y vidrieras de las catedrales se esconden también muchos mitos y misterios, aunque por encima de todas sobresale la de Notre-Dame de París, inspiradora de numerosas leyendas y misterios pero sobre todo de la aclamada novela "Nuestra Señora de París", de Víctor Hugo, que narra la desdichada historia de amor entre la gitana Esmeralda y el jorobado Quasimodo.

En su recorrido por los principales templos góticos, Corral recuerda que éstos surgen en una época luminosa en la que la mujer "gana espacio político, físico y cultural" y renace una nueva mentalidad en torno a la figura femenina que quedó cercenada a partir de la crisis del siglo XIV.

En la dura competencia de los obispos de la época por levantar su propia catedral gótica se perdieron en Europa "magníficos ejemplos" de catedrales románicas, como las de Burgos o León, al derribar las catedrales románicas para aprovechar las piedras y el espacio y levantar un imponente templo gótico.

La de Santiago de Compostela "no se perdió de milagro", según este historiador, quien recuerda que la gran catedral gótica quedó interrumpida por la crisis del siglo XIV y eso llevó a mantener la catedral original, "una suerte para todos".

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