Las mujeres que marcaron la vida de Michael Jackson

  • Se publica en castellano 'Confesiones de Michael Jackson. Las cintas del rabino Shmuley Boteach', libro confesional que, entre otros aspectos íntimos de la vida del rey del Pop, nombra a las mujeres que marcaron su vida.
Un capítulo más de la vida de Michael Jackson.
Un capítulo más de la vida de Michael Jackson.
lainformacion.com
David González / Aviondepapel.tv

En el año 2000, Uri Geller le presenta a Michael Jackson al rabino Shmuley Boteach. Comenzaban así unas íntimas sesiones confesionales entre el Rey del Pop y este extraño asesor espiritual. El rabino grabó los encuentros en más de 30 horas de cintas magnetofónicas. Su transcripción dio lugar a un polémico libro que ahora se traduce y se publica en España.

Entre las páginas de Confesiones de Michael Jackson. Las cintas del rabino Shmuley Boteach (Global Rhythm, 2009) encontramos pasajes que desvelan, entre otros aspectos de su personalidad, la relación que Jackson tuvo con un grupo de mujeres elegidas que marcaron su vida.

"Ahora las mujeres son muy buenas actrices (…) ¡Te engatusan de una forma! Fíjate en la Biblia (…): hay historias de mujeres que han llevado a la perdición a los hombres más poderosos, ofreciéndoles lo que tienen entre las piernas; Sansón, por ejemplo, nadie podía cortarle el pelo hasta que llegó Dalila y se lo llevó a la cama", afirmaba el artista frente a su confesor.

En un tránsito de acercamiento y alejamiento del artista hacia el sexo femenino, el libro nos muestra a un Jackson inmaduro, algo ingenuo, enamoradizo y, a menudo, rencoroso con aquellas mujeres con las que compartió amistad, matrimonio, enemistad, noviazgo o amores platónicos: desde Brooke Shields, Elisabeth Taylor, Diana Ross, Tatum O'Neal, Madona, Lisa Marie Presley, incluso la princesa Diana de Gales.

Diana de Gales

En este sentido, Jackson confesaba su atracción por la princesa británica, por encontrarla casi como "un alma gemela", dada su devoción por ayudar a los niños: "Era muy femenina y con mucha clase. Sin lugar a dudas era mi tipo", contaba el artista a su confesor espiritual.

Sin embargo, Cuando Boteach le preguntaba al cantante por qué no le pidió una cita a la princesa Diana, éste respondía que nunca se atrevió. La respuesta de Jackson nos dibuja su personalidad: "Yo no le he pedido una cita a una chica en mi vida. Me lo tienen que pedir ellas".

Brooke Shields

El libro también relata otros encuentros juveniles del artista. Hablamos de Brooke Shields. Cuando Jackson tenía 23 años, su habitación estaba empapelada con fotos de la actriz y modelo, protagonista entre otros filmes de "El Lago Azul": Jackson la idolatraba, sin lugar a dudas.

Ambos coincidieron en una fiesta, se intercambiaron los teléfonos, se llamaron. En un rencuentro posterior, más -digamos- discreto, Shields hizo lo que Jackson denominó "un acercamiento". El artista –desbordado por la situación- se asustó. Así, entre él y la actriz, tras este encontronazo, nunca hubo una relación sexual.

Madonna

Por el contrario, en este libro confesional, sí nos adentramos en las turbulencias del Rey del Pop con Madonna. Jackson revive en estas grabaciones los gustos de sexo duro de la cantante, su interés por los clubes de estriptis o las provocaciones telefónicas de alto voltaje que surgieron entre ambos.

"¿Qué te parecería si te llamara por teléfono para contarte que tiene los dedos entre las piernas? A mí me lo hacía y yo le contestaba `¡ay, Madonna, por Dios!´, y ella me salía con `cuando colguemos quiero que te toques pensando en mí´. Ése es el tipo de cosas que te suelta todo el tiempo, de verdad. Y luego la siguiente vez que la ves te dice: `Éste es el dedo que usé anoche´. Era salvaje, estaba completamente fuera de control", menciona el Rey del Pop.

Elizabeth Taylor

En este libro, además, Jackson recrea su íntima amistad con Elizabeth Taylor, otra de las grandes mujeres de su vida: "Elizabeth y yo somos como hermanos, como madre e hijo, como amantes… es una mezcla de todo… es algo muy es¬pecial. A veces por teléfono empezamos a quejarnos poniendo vo¬cecillas lastimeras: `Te necesito´, `y yo a ti´".

Janet Jackson

"Confesiones…" también retrata aspectos íntimos de Jackson, como su turbia relación con su padre –al que el artista odiaba a muerte- y sus conversaciones al respecto con su hermana Janet. Revelador es este fragmento:

" Y se lo decíamos a nuestra madre, nos lo decíamos los unos a los otros. Me acuerdo de una cosa que nunca olvidaré: estar hablando con Janet y decir…

—Janet, cierra los ojos.

—Ya los tengo cerrados.

—Imagínate a Joseph en un ataúd, muerto, ¿te da pena?

—No —me contestaba".

En definitiva, "Confesiones de Michael Jackson", nos descubre una parte importante de la vida del artista: las mujeres que rodearon a la estrella del pop, a parte, eso también, de los secretos de sus conciertos, su vinculación con los fans o su filia por los niños. No en vano, Michael lanzaba, frente al rabino Boteach, una frase que, leída en la distancia, da que pensar:"Para mí no hay nada más puro y espiritual que los niños y no puedo vivir sin ellos. Si ahora me dijeras `Michael, no puedes volver a ver a un niño´, me quitaría la vida. Te juro que lo haría, porque no tengo ninguna otra razón para seguir viviendo".

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