"Los divinos", con Zapata y Malikian, desembarca en el Español

Madrid, 13 dic.- El tenor granadino José Manuel Zapata y el violinista libanés Ara Malikian han juntado su voz y su música para reirse de "los que van de sublimes por la vida" en el espectáculo "Los divinos", que tras su estreno en febrero en Madrid, desembarca desde mañana en el Teatro Español.

"Es maravilloso venir a este teatro y encima en Navidad. Aunque es un espectáculo pensado para adultos la forma de afrontarlo lo hace perfecto para las familias, con niños a partir de los cinco años", detalla a Efe Zapata, que junto con Malikian ha interpretado un número desde uno de los balcones del Español que dan a la plaza de Santa Ana para sorpresa de los viandantes.

"Los divinos", que se estrena el día 23 en los Teatros del Canal, donde estará hasta el 4 de marzo, es una aventura "de humor y virtuosismo" en la que hay de todo: "música, por supuesto, teatro y hasta baile pero, sobre todo, muchas risas".

El espectáculo es una oportunidad de difundir, además la música clásica, algo en lo que Malikian se ha implicado notablemente con espectáculos como "PaGAGnini".

Tchaikovsky, Dvorak, Paganini, Albéniz y Saint-Saens se mezclan con autores napolitanos, "algo" de Schumann, un aria de "Rigoletto", de Verdi y hasta la jota de Pablo Sarasate, además de ritmos actuales como el tema central de la banda sonora de "Flash Dance" o el "I want to break free", de Queen.

La trama argumental de "Los divinos" es la de los cinco hijos de una "casta diva", que muere con la frustración de que ninguno de los cuatro mayores es "más que un instrumentista" y sin saber que el menor tiene una voz prodigiosa.

Cuando la "criatura", Ludovico, descubre el portento de su garganta se dedica a ser un "canallita", "un pedazo de divo", que machaca a sus hermanos.

Zapata, que interpretará después en Dusseldorf "El Barbero de Sevilla", en Valencia su primer espectáculo en solitario, "Opérame", y en abril protagonizará en los Teatros del Canal "El pimiento verde", cree que "Los divinos" es, "básicamente, la oportunidad de reirse durante una hora y media de todo, algo que hoy en día no se puede dejar pasar", bromea.