Los estudiantes que hablan castellano fracasan un 40% más en Cataluña que en Euskadi

Los estudiantes que hablan castellano en Cataluña tienen un fracaso escolar un 40% superior a los que se expresan en este idioma habitualmente en el País Vasco o la Comunidad de Madrid, según Convivencia Cívica Catalana.

Así se desprende del último informe realizado por esta entidad sobre los resultados de alumnos catalanes en función de la lengua propia del estudiante, bajo el título 'Análisis de los resultados de la última evaluación PISA en Cataluña. Influencia de los factores lingüísticos'.

"El fracaso de los estudiantes castellanohablantes en Cataluña es un 40% superior al de los alumnos castellanohablantes en el País Vasco y la Comunidad de Madrid", dice Convivencia Cívica Catalana en este análisis, al que ha tenido acceso Servimedia.

Según la interpretación que esta asociación catalana hace de los resultados de la prueba PISA, "los estudiantes castellanohablantes presentan un ratio de fracaso notablemente superior en Cataluña que en otras autonomías con características similares", es decir, comunidades con una renta per cápita y un desarrollo social parecido.

La proporción de alumnos castellanohablantes que fracasaron en el País Vasco en la última edición de PISA fue del 14,6% y en Madrid del 15,8%, mientras en Cataluña el fracaso del alumnado castellanohablante ascendió hasta el 23,2%, unos ocho puntos superior al de los anteriores territorios, lo que representaría un fracaso de un 40% superior en términos relativos.Los que hablan castellano fracasan el doble

Otra de las principales conclusiones de este estudio es que en Cataluña el fracaso de los alumnos castellanohablantes es el doble que el de los catalanohablantes.

Además, explica que "el sistema de inmersión lingüística no es ajeno a los malos resultados de los alumnos castellanohablantes en Cataluña". En consecuencia, Convivencia Cívica subraya que "los alumnos catalanohablantes juegan con ventaja" en la enseñanza que se imparte en esta autonomía.

Por ello, esta asociación denuncia que los niños cuya lengua materna es el castellano "deben sumar en el proceso de aprendizaje a la dificultad propia de las materias una dificultad lingüística añadida".
Todas las conclusiones obtenidas a través de este análisis serán trasladadas al Ministerio de Educación y a los organismos internacionales competentes en el ámbito educativo.