Marina Núñez remeda a El Bosco en versión contemporánea y clave tecnológica

  • El sentimiento de culpa, el pecado y la desesperada lucha por huir del infierno son algunos de los mensajes que subyacen en la instalación audiovisual que, con el lema "El infierno son nosotros", ha presentado hoy Marina Núñez en Valladolid, un remedo del pintor El Bosco en clave contemporánea.

Valladolid, 28 dic.- El sentimiento de culpa, el pecado y la desesperada lucha por huir del infierno son algunos de los mensajes que subyacen en la instalación audiovisual que, con el lema "El infierno son nosotros", ha presentado hoy Marina Núñez en Valladolid, un remedo del pintor El Bosco en clave contemporánea.

"La idea de la culpa o del pecado que nos ha transmitido la religión a lo largo de los siglos", según palabras de Núñez, centra esta recreación del infierno que, junto a "Fisuras", de Ignacio Llamas, también inaugurada hoy, son las dos exposiciones que cierran el programa conmemorativo del décimo aniversario (2002-2012) del Museo de Arte Contemporáneo Español Patio Herreriano.

Cuerpos torturados, poseídos, convulsos y endemoniados que tratan de huir de las llamas son proyectados en los elevados muros de la Capilla de los Fuensaldaña (siglo XIV), la sala más emblemática del museo por las posibilidades que ofrece para la expresión artística, convertida en un infierno virtual tras la intervención de Núñez (Palencia, 1963).

"Son personas -modelos desnudos, masculinos y femeninos previamente grabados y posteriormente intervenidos- que intentan huir de unas llamas, de un infierno que en realidad son ellos mismos", de ahí el título de esta instalación.

Las ventanas ojivales, el rosetón y las hornacinas funerarias de los laterales de la gran capilla escupen un fuego virtual merced a un proyector que, desde el centro de la sala, dispara las imágenes hacia los lugares elegidos por la artista.

"Son espacios más psicológicos que físicos", ha precisado la creadora palentina, licenciada en Bellas Artes por la Universidad de Salamanca, doctorada en la de Castilla-La Mancha y, desde 1999, profesora de pintura en la Universidad de Vigo.

La puesta en escena recuerda, en cierto modo, las inquietantes pinturas del holandés El Bosco (hacia 1540-1516) en telas como "La nave de los locos", "La extracción de la piedra de la locura" y "Los siete pecados capitales", con una humanidad desesperada y a la deriva por su propia culpa y ante la perspectiva del fin del mundo.

Desde los años noventa, Marina Núñez se ha convertido en una de las artistas españolas de mayor proyección nacional e internacional debido a la "lógica evolución" de su quehacer, desde el lienzo tradicional hasta los nuevos soportes digitales, ha explicado a los informadores la directora del Museo Patio Herreriano, Cristina Fontaneda.

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