Avilés (Asturias), 15 ene.- El director de teatro Mario Gas entrenará mañana en Avilés el último montaje de "Invernadero", de Harold Pinter, con el que sube a las tablas la esencia del autor inglés que fue capaz de "hacer disfrutar al espectador, inquietarlo y, al mismo tiempo, fustigar la sociedad que nos rodea y al poder".
"Pinter siempre azota cualquier contracción que se produce en las llamadas sociedades evolucionadas y occidentales, neoliberales, y siempre ha estado muy preocupado por lo que ocurría alrededor", ha declarado Mario Gas, que ha puesto el ejemplo del "demoledor, lúcido y contundente discurso" con motivo de concesión del Premio Nobel de Literatura en 2005.
Bajo la apariencia de un establecimiento de reposo, el mecanismo del poder establecido se muestra en el "Invernadero" como una farsa de la alienación del hombre occidental, clave recurrente en la dramaturgia del Nobel inglés.
Mario Gas, uno de los más prolíficos directores de teatro en España, regresa al Palacio Valdés con el estreno absoluto de una versión de Eduardo Mendoza de "Invernadero", interpretada por Gonzalo de Castro, Tristán Ulloa, Isabelle Stoffel, Jorge Usón, Carlos Martos, Javivi del Valle y Ricardo Moya.
Mario Gas ha presentado hoy este montaje en el coliseo local avilesino, junto a buena parte del elenco, que mañana, a las 20:15 horas, se subirá al escenario con los nervios de cualquier estreno y del primer contacto con el público.
El director ha reconocido que, como sucede con todos los estrenos, "hay nervios" y ha asegurado que "si alguien que va estrenar un espectáculo y dice que no tiene nervios, entonces que no se dedique a esto, que se retire porque son consustanciales y síntoma de responsabilidad".
"Pero más allá de estos nervios, estamos todos muy contentos y comprometidos con el trabajo que hemos hecho y muy satisfechos de estar aquí, en Avilés, una ciudad que acoge muy bien los estrenos y donde trabajas en este teatro como si estuvieras en casa", ha comentado Mario Gas, muy asiduo a este coliseo.
"Intentamos servir este texto de Pinter, que es un texto muy inclasificable, porque es una especie de comedia bárbara sardónica sobre los mecanismos del poder y su incidencia en los seres y en los ciudadanos normales", ha explicado Gas.
El conocido director de teatro se ha sentido fascinado por el "lenguaje tan peculiar, paradójico y cambiante de estilo del que siempre ha hecho gala Harold Pinter".
Uno de los protagonistas, Gonzalo Castro, se ha mostrado encantado de regresar a Asturias, donde tanta fama le dio el personaje televisivo del doctor Mateo, "con este aparataje y texto tan brutal, y con la dirección de Mario Gas, que ha hecho un trabajo extraordinario". EFE
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