Maruja Torres: "A veces, cuando de verdad te entra la lucidez, descubres que sólo tienes delante a un imbécil"

  • Diana Dial es directa, no tiene pelos en la lengua. Trabaja para la verdad más que para la ley. Ni siquiera tiene licencia para ejercer de investigadora privada y es el personaje de la última novela de Maruja Torres. lainformacion.com ha hablado con la escritora para que nos cuente un poco más sobre ella y sobre 'Fácil de Matar', su última novela.
Fácil de Matar es la última novela de Maruja Torres
Fácil de Matar es la última novela de Maruja Torres
lainformacion.com
Ylenia Álvarez

Maruja Torres (1943) vuelve a rescatar a su personaje Diana Dial como protagonista de su última novela con la que se adentra en el género negro. Con 'Fácil de Matar' consigue que el lector se vea atrapado por la trama, por los movimientos de todos los personajes y se entregue por completo a la novela.

Diana Dial, una reportera retirada, nunca huye del peligro, es más, lo que realmente le gusta es oler el conflicto y meterse en el meollo. Su instinto o "la punzada en el estómago", como dice ella, y que tanto le valió en sus años como reportera, ahora la han convertido en un sagaz sabueso. Retirada, al menos nominalmente, ha dedicado toda su vida al reporterismo para el prestigioso diario español La Gaceta  Universal. Como buena periodista old school, no ha perdido su afán investigador desde que se jubilara hace cuatro años.

1. Quizás muchos pudieran establecer similitudes entre Maruja Torres y Diana Dial…

Y tienen todo el derecho a hacerlo, puesto que yo misma he declarado sin empacho que es un "alter ego" que necesitaba para reconvertir mis andanzas y mis observaciones por los mundos mediterráneos en novelas de intriga. Diana Dial tiene ventajas: 14 años menos, una pensión vitalicia por parte de un ex marido con mala conciencia (algún día aparecerá en otra novela), y la posibilidad de moverse como detective por donde yo ya no puedo hacerlo como reportera. O sí puedo, pero sin publicar reportajes.

2. ¿Cómo surgió este personaje y la idea de hacer una serie a lo Agatha Christie?

Más que a lo Agatha Christie (que también) a lo Donna Leon, a lo Manuel Vázquez Montalbán, a lo Chandler... En fin, a lo que suele ocurrir en la novelística negra, de misterio o policíaca. Si un personaje pega, pues pega. No olvidemos a Petra Regalado, tampoco, la criatura de Alicia Giménez Barlett. El personaje fue mi "alter ego" ya en mis dos primeras novelas, "¡Oh, es Él!" y "Ceguera de amor", que eran de humor bastante iconoclasta. Dejé aparcaca a Dial y, cuando estaba pensando el fabricar una protagonista, se me apareció. "¡Pero si ya la tengo!", bramé (lo estaba comentando por teléfono, desde Beirut, con una amiga de más de 20 años de antigüedad que tengo en Italia). Y ella gritó: "¡Diana! ¡Con lo que a mí me gusta". Por  supuesto, la vida le ha enseñado a Dial muchas cosas, en este paréntesis. Más o menos como a mí.

3. En 'Fácil de matar' haces una descripción de Beirut que te envuelve, que arrastra a contemplar otros escenarios y otra forma de pensar, ¿sientes cierta nostalgia del tiempo que viviste allí?

Carezco de nostalgia. Todo lo bueno que me dio Beirut -y fue mucho- ocurrió en tiempo de guerra o de turbulencias. Por lo tanto se hace difícil añorarlo, porque hubo mucho muerto y mucho miedo y mucha inquietud. También mucha fuerza por mi parte. Forjó mi carácter, en parte. Los cuatro años que he vivido allí, desde el otoño del 2006 hasta abril del 2010, también me han servido de mucho. Pero ya no da más de sí, en lo que a mí respecta. Ahora bien: en mi casita de los recuerdos, Beirut ocupa una de las habitaciones principales.

4. Diana Dial es una periodista de raza. ¿Hacen falta periodistas como ella hoy en día, esos que se meten donde nadie se mete?

No, los hay. Claro que los hay. Lo que no hay son empresas dispuestas a costearles lo que supone la elaboración de un reportaje a fondo. Por eso todo es ahora tan superficial, con la excusa de las tecnologías. Pero Internet admite -y mucho más- grandes reportajes bien documentados.

 

5. ¿El periodista debe tener presente siempre la justicia?

Tiene que tener presente la verdad. Normalmente, si cuentas la verdad sirves a la justicia: que la gente se entere de lo que ocurre es justo. Lo que hagan luego las fuerzas poderosas con la verdad ya no es asunto del periodista, aunque debe dolerle siempre que no se llegue hasta el final en el castigo a los culpables y la defensa de las víctimas.

6. Los principales crímenes al final se mueven por pasiones, como relatas en el libro, ¿eso no cambia en ninguna parte de mundo: en España, en Beirut o en dónde sea?

Exacto. Codicia. Amor. Venganza. Ansia de poder. Pero hay sitios en donde siempre ha sido más fácil -tipo Líbano- y sitios que van aprendiendo -tipo España-.

7. Uno de los principales atractivos del libro recae en la figura de Matas por la curiosidad y la ambigüedad que genera. Muchas mujeres como Diana se ven atraídas por ellos… ¿qué tienen?

Yo creo que Diana se encuentra en un momento hormonal delicado -tiene 54 años- y que además posee una malsana tendencia a creer que las personas que hablan poco tienen algo interesante dentro. Te puedo asegurar, de todas formas, que el tipo que inspiró el personaje de Matas es mucho menos interesante que su réplica en mi libro. A veces, cuando de verdad te entra la lucidez, descubres que sólo tienes delante a un imbécil. Y sí, algo masocas sí que somos. Pero hay que tomárselo con humor y cierta razonable mala leche.

8. Todos los personajes del libro están muy bien definidos. Por un lado, los femeninos: Cora (entiendo que un homenaje a 'El Cartero siempre llama dos veces'), Yumana, la propia Diana, pero también Neguezt. También los masculinos como Matas, Fattush o Ramiro.  A ellas se las ve mucho más fuertes. ¿Qué importancia tiene la trama coral en la novela negra?

Una novela
 de misterio, tipo Agatha Christie, puede encerrar a doce tipos en un tren y basta con eso. Se define desde un punto de vista social, claro -esa maravillosa frase de "Asesinato en el Orient Express", pronunciada por una lady respecto a una institutriz: "La pobre es sueca"-, pero no es su interés principal. En cambio, la novela negra, sin un tema coral que resulte social -en este caso, la situación del libro, y muy especialmente la forma de tratar al servicio doméstico-, pues no funciona. Espero haberlo conseguido.

9. Diana se ha ido a Luxor, ¿ya tienes pensada la trama del próximo libro? ¿Para cuándo podremos contar con él?

Espero que éste no me cueste tanto como el otro -estaba muy insegura, era un triple salto mortal sin red, meterse meterse en el género-, pero un añito y medio o dos no me los quita nadie. Eso sí: como mucho. Tengo pensada la historia, tengo pensados más de la mitad de los personajes, tengo pensada la situación social, tengo pensado uno de los asesinatos, y sé que Joy y Yara, así como el inspector Fattush, reaparecerán en Egipto, para satisfacción de Diana y mía.

Mostrar comentarios