Nouvel no inaugurará hoy su Philharmonie en protesta por el resultado actual

París, 14 ene.- El arquitecto de la Philharmonie de París, Jean Nouvel, anunció hoy que no asistirá esta noche a la inauguración de este edificio, destinado a expandir la música entre todos los públicos, por estar en desacuerdo con su estado actual.

Desde las páginas del vespertino "Le Monde", su cuenta en Twitter y su página web, Nouvel explica por qué -en esta velada inaugural presidida por el jefe de Estado, François Hollande- no quiere dar su acuerdo con su presencia a "una arquitectura que oscila a menudo entre la imitación y el sabotaje",

El autor de la Torre Agbar de Barcelona, el Museo Branly de París o el Louvre de Abu Dabi denuncia en particular las condiciones de trabajo que le fueron impuestas y su alejamiento forzoso de múltiples decisiones vitales, así como "el desprecio, estos dos últimos años, por la arquitectura y el oficio de arquitecto".

La Philharmonie, destinada a implantar la música, de la más prestigiosa a la más popular y experimental, en la vida de los parisinos de todas las edades, y muy especialmente de los habitantes de las barriadas del noreste de París, "es el proyecto cultural francés más importante de este inicio de siglo", estima.

Denuncia, no obstante, haber sido convertido en "chivo expiatorio" y acusado injustamente entre otras cosas del exagerado coste final alcanzado (455 millones de dólares, frente a los 235 previstos en el momento de su lanzamiento, en 2006) sin que ello tuviera nada que ver con su trabajo.

Ante todo, mantiene que la inauguración hoy es excesivamente precoz, y que en 2013, el propio Pierre Boulez, alma espiritual de este programa, consideraba "inútil comenzar demasiado pronto", pues había que "rodar bien la sala" y regular su acústica.

Una acústica que se considera ya como una de las mejores del mundo, si no la mejor, y que los músicos de la Orquesta de París que el lunes realizaron en ella su primer ensayo general elogiaron entusiasmados, pese a que todavía se estaba terminando de acondicionar la sala en ese momento.

Contra la recomendación de Boulez a su amigo Laurent Bayle, (presidente de la Philharmonie y principal impulsor del proyecto frente a los múltiples obstáculos surgidos desde su inicio), y contra los consejos que él mismo hizo, también desde 2013, la institución "se disparó una bala en cada pie", asegura Nouvel.

Mientras al arquitecto se le describió "como estrella-artista-caprichosa, se le denigró y se le dejó al margen secretamente, con amenaza de exclusión", la asociación de la Philharmonie entró "en la ilegalidad para ocultar en periodo electoral los costes reales", afirma.

Ahora, "estamos en la preapertura, en el preludio de futuras sinfonías dedicadas a todas las generaciones por venir", recalca el artista, quien estima imperativo lanzar un debate sobre las misiones del arquitecto, el maestro de obras y el contratista, así como sobre "la utilización del dinero público en las construcciones públicas".

"Con el tiempo, y muchos cuidados, como para los bebés prematuros, sus estigmas desaparecerán...", razón por la que adelanta su intención de hacer valer su "derecho moral sobre la conformidad de la obra y otros puntos cruciales", con el fin de obtener los acabados dignos.

"Estas son las condiciones para salvar la importante inversión que representa este magnífico proyecto", estima.