Pop electrónico y jazz cierran SónarGalicia con público entregado

A Coruña.- Las propuestas de pop electrónico de los franceses Air y la fusión experimental de jazz y hip hop de la nueva estrella norteamericana Flying Lotus han resonado con fuerza entre las más de 7.000 personas que se congregaron en la última jornada de SónarGalicia.

Tras dos días en los que han desfilado por la edición gallega del festival artistas de calado internacional como LCD Soundsystem o los británicos Broadcast, el dúo francés Air ha sacudido el recién estrenado escenario de SonarClub con su nuevo trabajo, "Love 2", una mezcla de ritmos pop y chill siempre bajo una base electrónica.

La actuación de este referente ineludible del pop mundial ha revitalizado el ánimo del público, ensimismado tras dos días de un festival repleto de actuaciones vanguardistas y espectáculos sonoros insólitos.

El "beatmaker" norteamericano Flying Lotus ha sido otra de las estrellas de la noche con su propuesta de hip hop abstracto, una fusión experimental entre jazz, electrónica y hip-hop.

Los éxitos de su disco "Cosmogramma", uno de los álbumes más premiados en este 2010, tomaron forma en SonarVillage, el escenario escogido para presentar a los grupos más innovadores y vanguardistas.

Este mismo escenario acogerá el fin de fiesta de este festival de música electrónica, que se celebró por primera vez simultáneamente en A Coruña y en su sede habitual de Barcelona, con la actuación de los británicos Hot Chip, los nuevos reyes del pop electrónico que llegan con su nuevo título "One Life Stand" bajo el brazo.

Esta última jornada del festival pone fin a una primera edición de SónarGalicia, por la que han desfilado más de 100 artistas nacionales e internacionales, y que ha atraído hasta A Coruña a más de 14.000 personas.

SónarGalicia ha sido una de las apuestas más importantes para reforzar la trascendencia internacional del Xacobeo y difundir un año santo "sinónimo de modernidad, proyección internacional e interés por todo tipo de expresión artística", tal y como explicó en su presentación el conselleiro de Cultura, Roberto Varela.

Así, en un mismo espacio, han convido espectaculares shows musicales con secretos escenarios expositivos donde esculturas musicales como las del británico Felix Thorn e innovadores artilugios como el sonoscopio del gallego Horacio Gonzalez jugaban con los límites de la sonoridad.

Esta tradicional apuesta por lo vanguardista se extendió también a Sonar Cinema, un escenario en el que el cine habló de música a través de tres documentales y una película, Finsterrae, una epopeya que resume la esencia de SónarGalicia: un puente entre culturas.