Protesta de los fotógrafos en el hemiciclo del congreso contra su nueva ubicación

Varios de los periodistas gráficos que cubrían esta mañana la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados renunciaron a entrar en el hemiciclo en protesta por su nueva ubicación, que les dificulta considerablemente su trabajo.
En esta sesión plenaria los fotógrafos han estrenado su nueva ubicación dentro del hemiciclo, situada como antes a ambos extremos de los escaños pero en la que se han hecho obras y en la que, aseguran, tienen mucho más complicado realizar su trabajo.
En primer lugar, están a menos altura que antes y las torretas están rodeadas por un murete, con lo cual no pueden captar imágenes de una buena parte del hemiciclo.
Una de las normas no escritas que siempre ha regido en el hemiciclo para los fotógrafos es que no pueden pasar de una torreta a otra por dentro del salón de plenos, sino que tienen que salir al pasillo y entrar por el otro lado.
Ahora, en vez de acceder a las torretas como antes, por una escalerilla que podían salvar dando un salto, tienen que hacerlo por una puerta, lo que les impide la agilidad y rapidez necesarias para llegar de una a otra, sobre todo si tienen que hacerlo varios a la vez, como es habitual en algunas sesiones.
Se quejan, en definitiva, de que no tienen posibilidad de captar lo que ocurre en buena parte del hemiciclo, de que la falta de altura y de gradación en las torretas hace que se estorben unos a otros, y de que para poder moverse y hacer su trabajo tienen que mover a los demás que estén en la misma torreta.
Desde el gabinete de prensa del Congreso se han comprometido con ellos a estudiar sus quejas y a intentar mejorar sus condiciones de trabajo, pero alegan que en todo caso tendrán que esperar a que haya un parón en las sesiones plenarias para poder corregir las obras.