Tom Cruise y Cameron Díaz, a por una taquilla dañada por la Roja

  • Shrek llegó a España dispuesto a teñirlo todo de verde, pero la Roja lo borró del mapa. El estreno de la cuarta entrega del ogro arroja datos muy discretos. Esta semana Tom Cruise y Cameron Díaz intentarán rascar bola con la primera comedia romántica de acción del verano: 'Noche y Día'.
Escena de la película 'Noche y Día'
Escena de la película 'Noche y Día'
lainformacion.com
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 'Shrek felices para siempre' no ha podido con la Selección Española. La cuarta entrega de la saga ha llegado a los 3,9 millones de euros de recaudación desde su estreno el pasado jueves hasta el domingo. Un dato discreto comparado con el de las entregas anteriores. Lo mismo sucedió en su primer pase en EEUU, con un 14% menos de recaudación que las anteriores películas. Y eso que en esta ocasión llegaba en 3D. Eso sí, al ogro lo que es del ogro, y se ha colocado como el filme más visto del fin de semana, seguido de los vampiros de Eclipse, que han chupado poca sangre, y la incombustible Prince of Persia de Disney, ocho semanas ya entre lo más visto.

Shrek adelantó su estreno al miércoles. Así maquilló un poquito sus datos de recaudación. Los que también se adelantan al viernes son Tom Cruise y Cameron Díaz con 'Noche y Día', que llega  hoy a la cartelera. En su estreno en EEUU los rostros de Hollywood no pudieron con los juguetes de Toy Story 3. En España Woody y los suyos no llegan hasta la próxima semana y se subieron al tren de la mareja Roja felicitando a los chicos de Del Bosque.

Asaltar la taquilla ¿misión imposible?

Hasta el día del estreno de Toy Story 3 el primer puesto de la taquilla está libre. 'Día y Noche' lo intentará hoy. Además de dos rostros conocidos de Hollywood como Cameron y Cruise y del guión aventura-amor-espionaje-acción muy veraniego, de la película se lleva hablando en España desde hace meses por ser Sevilla una de las ciudad elegida para grabar algunas de las escenas y para preestrenar la película.

Su grabación ha dejado infinididad de anécdotas, como ver un encierro de San Fermín por las calles de Sevilla... Cruisse salió al paso así: "Esto es una película y España es un país al que amo y quería vivirlo con muchas experiencias". Un día se paró para dejar paso a una cofradía, otro porque se escaparon siete toros. Al final el rodaje dejó a Sevilla 33 millones de euros

Otro rostro conocido en España que visitó la ciudad andaluza fue Jordi Mollá (Blow, Dos Policías Rebeldes II), que asume el papel del vil traficante de armas Antonio Quintana. También él sintió atracción por el guión. "Se trata de un conjunto fantástico de conceptos muy atractivos que conjuga múltiples estilos en una sola película", nos dice. En cuanto a su personaje, Mollá lo describe como un "tío elegante, peligroso, sexy, encantador, profundo, sombrío y divertido que quiere poder". Pero comenta que la clave era, sin embargo, no llevar a Quintana más allá del límite. "Jim quería mantenerlo real en todo momento, y eso resulta de lo más complicado", nos dice. "Jim está siempre intentando conseguir lo máximo de sus actores y al momento".


Acción sin dobles

Además de Sevilla en la película aparecen otras ciudades como Kansas, donde empieza la historia de amor-odio entre June (Cameron Diaz) y Roy (Tom Cruise), Boston, Nueva York, los Alpes, Salzburgo, o el Caribe tropical. En todas hay escenas de acción.

En Salzburgo, Austria, uno de las secuencias tiene lugar una huída que se inicia en el tejado de un edificio, donde Roy y June se encuentran atrapados, sin más salida que saltar un abismo por encima de las vistas nocturnas de la ciudad. "Sólo teníamos 36 horas para preparar equipos y rodar en la oscuridad, con lluvia, pero salió a la perfección, lo que resultó extremadamente satisfactorio", destaca el coordinador de riesgos Greg Smrz. Tom Cruise recuerda vivamente la ejecución de la escena, sin arnés, y terminando en una espectacular caída controlada de más de 30 metros. "Recuerdo que miré por el hueco por donde iba a saltar del techo, y luego esa enorme viga de acero donde tenía que aterrizar. Y tenía esa fina y pequeña almohadilla sobre ella. Miré a los especialistas y el jefe Casey O'Neil dijo, 'Está acolchada. Pero claro, va a doler".

En Boston, Cameron Diaz muestra su vena aventurera al coger el volante de un GTO del 66 en una de las persecuciones de coches más salvajes. Comenta un impresionado Smrz: "Cameron resultó tener mucho talento al volante. La probamos e hizo un trabajo excelente, acelerando a fondo, haciendo trompos de 180 grados, tanto que al final terminó haciendo la propia escena de conducción. Ella podría sin problemas realizar toda una película de persecuciones automovilísticas".

Otra escena clave que inicia toda la historia, la secuencia de apertura con el avión 727, y que requería a Tom Cruise una coreografía intensa y meticulosa de lucha en entornos muy reducidos. "Nos entrenamos cada día durante 30 días junto a Tom para preparar esa escena", recuerda Smrz. "Se trataba de una pelea de 75 movimientos, así que requirió mucho esfuerzo su diseño, coreografía y coordinación. Y Tom ejecutó todos y cada uno de sus movimientos".

El accidente de avión que tiene lugar a continuación en un campo de maíz de Indiana (realmente se rodó en Bridgewater, Massachussetts) fue otro desafío para la producción. "Los efectos más elaborados de toda la película se crearon para el accidente de avión", comenta Menardus, "para ello construimos un cardan de 33 metros sobre el que colocamos un fuselaje de 727, que ahora podíamos girar 45 grados en cada sentido para crear las turbulencias. Luego creamos una base de movimiento para la cabina y su choque real".

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