Vetusta Morla 'se hace grande' en el Día de la Música

  • La sexta edición del Festival Día de la Música Heineken ha arrancado este sábado en el Matadero de Madrid con un día entero de conciertos para todos los gustos. Los más aclamados, la banda madrileña 'Vetusta Morla'. Fue el día también de 'Anna Calvi', 'Toro y Moi', 'The Pains of being pure at heart' y 'Crystal Fighters', entre otros.
Pucho, vocalista de Vetusta Morla - (Foto: Heinekenpro.com, por Juan Perez-Fajardo)
Pucho, vocalista de Vetusta Morla - (Foto: Heinekenpro.com, por Juan Perez-Fajardo)
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Ylenia Álvarez

Mapas, uno de los discos más esperados del panorama musical español, veía la luz el mes pasado y por fin este sábado, los chicos de Vetusta Morla tenían cita con el público madrileño para la prueba de fuego: presentárselo en directo.

Un día antes la banda decía en Twitter que se morían de ganas por tocar en su tierra, pero lo cierto es había un interés mutuo, ya que el público del Matadero respiraba ansioso por que el grupo irrumpiera en escena.

Tras casi 35 minutos de retraso por problemas de organización (la gente estaba intentado todavía acceder a las 22:00 h.) sonaba el primer acorde de Los días raros (el mismo tema con el que pieza su nuevo álbum) y con él el público se adentraba en el mundo 100% Vestusta, lleno de texturas, sonoridades y crescendos claves y únicos.La admiración y el respeto del público

"Hola, somos Vetusta Morla, simplemente seis amigos que disfrutan mucho haciendo esto", recordaba Pucho. Y justo es lo que demostraron ser: seis tíos sobre el escenario, una banda, pasándoselo muy bien y empastando con el público de manera sorprendente.

Después del arranque con Boca en la tiera, En el río y Copenhague, vendrían Lo que te hace grande, Escudo humano y Cejas Ajenas, para volver a retomar temas de su anterior trabajo: Sálvese quien pueda, Valiente y Saharabbey Road.

Sin duda, éstos fueron los más coreados, los más retrasmitidos vía 'streamnig casero' a través del móvil y los que consiguieron soltar más halagos entre los asistentes como "este es un temazo" o "aayyy… mi canción favorita".

Pucho tuvo tiempo para acordarse del movimiento 15M y la marcha que se celebra este domingo: "Igual que estáis reunidos aquí por la música, uniros también para expresar vuestra indignación".  El público, muy vivo, contestó rápido con un "que no, que no, que no nos representan".

Todavía faltaban temas como Baldosas Amarillas, Maldita Dulzura, Mapas o Un día en el Mundo. Hora y media de canción tras canción (la actuación más larga del día) para cerrar con El hombre del saco.Carisma y talento sobre el escenario

La mayoría acudió por ellos este sábado al Matadero. Es cierto que ya desde el principio de la tarde había entusiastas escuchando a otros grupos y tampoco conviene generalizar, pero no puede negarse que el fenómeno Vetusta Morla existe y que estos chicos se han hecho grandes con este nuevo trabajo.

Y después de su concierto... la noche aún era joven. Muchos asistentes, animados por el buen poso dejado por los de Tres Cantos se encontraron con el sorpresón de los Crystal Fighters y se quedaron sin rechistar. Mejor dicho, sin rechistar pero saltando y bailando sin parar, eso sí. Música electrónica-gótica-rockeroalternativa. Ah, y fusión. ¿Alguien da más?

A las 00:00 hacía acto de presencia Sebastian Pringue, su líder. Con "casaca-levita" negra, moño en el pelo y moviéndose como un loco al más puro estilo de la madre de Norman Bates en Psicosis, Pringue derrochó carisma y talento. Puro teatro y ritmo, y frescura.

El sonido de la txalaparta mezclado con el de los sintetizadores, el de las guitarras eléctricas con el del ukelele, con el del tamboril o con el del txustu hizo vibrar al público. Todo sazonado con originales versiones de los temas de su último trabajo. "El directo es el directo", debieron de pensar.

Para calentar motores ya había pasado por el escenario la italiana Anna Calvi, que supo desprenderse de su fama de hacer música bastante simple y sencilla. Lo cierto es que su voz sonó con fuerza y su guitarra de una manera no tan inocente.

Quizás no muchos fueron sólo para ver a Lüger, pero a él no pareció importarme mucho, ya que tocando ante no más de 300 personas parecía hacerlo ante 3.000. Su directo es, sin duda, su gran baza.

Toro y moi es Chazwick Bundick, que hace una música que se mueve entre la alternativa y la eletrónica-discotequera. Puso la noto curiosa: se coló entre los asistentes después de su actuación (se ve que no quería perderse a Vetusta Morla).El descubrimiento

Al mismo tiempo que The Painsof Being pure at Heart tocaba en el escenario RTVE.es, Erin Hill& Her psychedelic Harp lo hacía en otro más intimista situado en una de las salas interiores.

Seleccionada por la organización de entre las bandas de Sonicbids, Eric Hill es cantante, harpista, compositora y actriz, y siempre le acompaña el multiinstrumentista Mike Nolan.

Hill estuvo simplemente maravillosa. Descalza con su arpa regaló dulzura, sentimiento y hasta un pequeño homenaje a David Bowie al interpretar una versión de su tema Space Oddity. El público arrancó en un aplauso que sólo fue superado por su interpretación del aria de Puccini O mio babbino caro, con el que dejó a los asistentes con la boca abierta y un cruce de miradas de complicidad en la sala.

Totalmente rendida y emocionada con los aplausos, su último tema sonó con los primeros pasajes de los Wild Beasts, encargados de abrir el camino a Vetusta Morla y de poner el toque punk revival británico a la noche.

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