24-m. Protestas y besos en el paseo de sánchez por el centro de málaga

MÁLAGA, 14 (SERVIMEDIA/MAY MARIÑO, ENVIADA ESPECIAL)

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, paseó esta tarde durante una media hora por la malagueña calle Larios, donde tuvo que aguantar las protestas de trabajadores de Hitemasa, que reclaman el dinero que desde 2005 aseguran les debe la Junta de Andalucía de su jubilación al cierre de la empresa.
"Hablaré con ellos", respondió Sánchez a las personas que aprovecharon para informarle de esta deuda con el Gobierno que dirige Susana Díaz, quien este jueves no estará en el mitin del líder socialista.
Sánchez llegó al centro de Malaga a las seis de la tarde. Además de los manifestantes con carteles de protesta, estaba la candidata a la Alcaldía, la socialista María Gámez, y el secretario general del Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso y del PSOE de Málaga, Miguel Angel Heredia.
En la marabunta que se arremolinó entorno a Sánchez había tanto militantes que querían saludarle y hacerse una foto con él, como manifestantes. También alguno que no le conocía pero que sentía curiosidad ante el espectáculo que se había generado.
Además, debido a que hubo cierta tensión entre los medios de comunicación, manifestante y ciudadanos, aparecieron dos coches patrullas de la Policía Nacional, con entre seis y ocho agentes.
Pese a todo, el líder del PSOE logró hacer un pequeño recorrido hasta la tradicional heladería Casa Mira. Allí disfrutó de una horchata y brindó por el PSOE con Gámez y Heredia. Una dirigente del PSOE de Málaga pagó los 4,50 euros de las tres horchatas.
Aunque los manifestantes no pararon en su protesta con gritos como "La Junta nos debe nuestro dinero" y "Queremos cobrar", Sánchez no perdió la sonrisa e incluso bromeó con las camareras de la heladería.

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