Animales exóticos invaden y amenazan la naturaleza madrileña

Madrid.- La biodiversidad madrileña se ha visto en los últimos años modificada por la presencia de animales y plantas alóctonas como el mapache y la cotorra argentina, especies exóticas, que conviven y compiten con las propias del bosque mediterráneo, amenazado por la presencia de estos invasores.

La mayoría de estas especies llegaron a la región para convertirse en mascotas, que tiempo después fueron liberadas, como ha ocurrido con el mapache, un animal propio de parajes americanos que desde hace tres años vive en el Parque Regional del Sureste.

En este enclave madrileño, la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio se ha lanzado a la caza del mapache para, explican, controlar la población, hacer un censo de la misma, y en definitiva, paliar los daños que está causando a la fauna autóctona.

Para "echar el lazo" a este animal, los técnicos de la consejería han colocado a dos ejemplares sendos dispositivos de seguimiento para localizar a sus iguales, a los que han capturado con técnicas de trampeo.

El futuro de estos animales pasará por el centro de acogida de animales silvestres de Soto de Viñuelas, que en los próximos meses abrirá sus puertas, anuncian fuentes de Medio Ambiente.

Sin embargo, y a pesar de los esfuerzos, la población de mapaches sigue en aumento, estiman desde la Consejería, ya que el número de presas capturadas ha pasado de 15 en 2007 a 23 este año.

Como el mapache, otras mascotas "exóticas" perturban los ecosistemas madrileños, como la cotorra argentina que ha colonizado la Casa de Campo, la tortuga de Florida que ha hecho suyas numerosas charcas de la región o los visones americanos que campan ahora por Guadarrama, donde se ubican las fábricas peleteras.

Para paliar lo que representa una de las mayores amenazas para la biodiversidad madrileña, según coinciden los ecologistas y la Consejería, ésta ultima una nueva legislación que regulará la tenencia de estos animales.

En los próximos seis meses, según ha dicho a Efe el subdirector general de recursos agrarios de la Comunidad, Jesús Carpintero, se emitirá un nuevo decreto que va a establecer nuevas condiciones para los establecimiento de venta de estos animales.

También se modificará la orden para que, aparte de a perros y gatos -como hasta ahora-, se considere animales domésticos también a los exóticos, para que sea obligatorio identificarlos y poder así obtener un censo de éstos.

"Se van a prohibir los animales potencialmente peligrosos, en el caso de los mamíferos todos los primates, y las especies silvestres que superen los diez kilos", detalla Carpintero.

Organizaciones como Ecologistas en Acción ven un "fracaso" en las técnicas que ha desarrollado el Gobierno regional hasta ahora para abordar el problema de las especies exóticas invasoras.

La principal solución sería, según el portavoz de ecologistas, Theo Oberhuber, "atajar las vías de entrada de los animales" y prohibir que se comercialicen cotorras y tortugas, entre otros.

Y es que, tener a estos animales como mascotas y su consecuente puesta en libertad, es una "auténtica barbaridad a nivel ecológico", precisa Oberhuber.