El número afectados por el brote de toxiinfección alimentaría producido en un centro escolar del San Bartolomé de Tirajana (Gran Canaria) ha ascendido a las 154 personas, según informaron a Europa Press fuentes de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias.
De esta cifra, 11 se encuentran ingresados, aunque todos ellos evolucionan de forma favorable y la mayoría presenta sintomatología leve.
Así, la Dirección General de Salud Pública, dependiente de la Consejería, explicó que las encuestas epidemiológicas, los síntomas presentados y la evolución de los afectados son compatibles con una toxiinfección alimentaria por salmonella producida por el consumo de alimentos contaminados.
Desde el mediodía de este pasado 1 de mayo, se tuvo conocimiento en el Servicio de Epidemiología y Prevención de la existencia de una serie de casos compatibles con una posible toxiinfección alimentaria, con afectación de niños y adultos vinculados a un centro educativo.
Inmediatamente, se contactó con los Centros de Salud de la Zona, servicios de urgencia de la red hospitalaria pública y privada localizada, en el mismo ámbito geográfico del colegio, solicitándoles información relativa a casos de gastroenteritis atendidos desde el día 30 de Abril, y se les manifestó la necesidad de comunicar urgentemente cualquier caso nuevo que se presente con estas características.
Finalmente, los servicios de inspección de Salud Pública del Área de Salud de Gran Canaria se han trasladado al colegio para la realización de la correspondiente inspección higiénico-sanitaria, control de manipuladores y toma de muestras, para su envío al Laboratorio de Salud Pública.
Entre los afectados se encuentran menores de 2 y 17 años y una decena de adultos, personal del centro escolar. Todos los enfermos señalados, estaban relacionados con el colegio y presentaban una clínica común de náuseas, vómitos, diarrea, dolor abdominal y fiebre, cuadro compatible con gastroenteritis por salmonella.
Según publicaba este viernes el Diario de Avisos, fuentes del centro educativo indicaron que aún es “muy pronto” para determinar si se trata de una intoxicación alimentaria o de un virus. Al respecto, recalcaron que algunos profesores y alumnos consumieron los mismos alimentos y se encuentran en buen estado; por contra, hay niños que no almorzaron y sí están enfermos.
Asimismo, las citadas fuentes reconocieron que hay docentes que presentan síntomas similares a los de los escolares, pero no pueden precisar si éstos se deben a un virus detectado durante la semana.Los familiares, indignados
Los niños que no precisaron atención hospitalaria se encuentran en reposo y a dieta en sus casas, a la espera de que sus síntomas remitan, según este mismo diario. Algunos padres destacaron que la farmacia de guardia de la zona agotó rápidamente el suero oral y los medicamentos prescritos a sus hijos, debido a la alta demanda.
Según el mencionado medio, un grupo de familiares de los menores mostró su indignación con lo sucedido y anunció que presentarán varias denuncias en las consejerías de Sanidad y de Educación, al tiempo que exigirán una reunión con los responsables del colegio para aclarar lo sucedido y conocer las medidas que adoptarán para prevenir otro caso similar. Pese a que el jueves no hubo actividad lectiva en el centro educativo, varios inspectores y los profesionales del centro estuvieron evaluando si se han seguido los protocolos de seguridad alimentaria.
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