Baleares socializa aún más la lucha contra el cambio climático

El Consejo de Gobierno de Baleares aprobó este viernes la revisión del Plan de Acción para la Lucha contra el Cambio Climático, que incorpora, a través del Plan de Participación Ciudadana, propuestas y aportaciones de ciudadanos, colectivos sociales, entidades cívicas e instituciones.
Tras el Consejo de Gobierno celebrado el pasado 27 de noviembre, que inició el proceso de revisión del plan, desde la Dirección General de Cambio Climático y Educación Ambiental, se han mantenido reuniones con instituciones públicas (consejos insulares, ayuntamientos) y con agentes sociales (asociaciones empresariales, sindicatos, organizaciones ecologistas), así como encuentros abiertos con la ciudadanía en general a las diferentes islas, para dar a conocer las propuestas del Govern en materia de lucha contra el cambio climático, a la vez que se han recogido las diferentes aportaciones y sugerencias.
Según reza el acuerdo aprobado hoy, en el proceso de revisión, que ha sido abierto también a través de las redes sociales, se han recibido un total de 56 propuestas de nuevas medidas para incorporar al plan, además de otras propuestas de modificación o mejora de medidas ya existentes, tanto al documento original del plan como al documento de revisión.
Entre las medidas incorporadas a la revisión del Plan de Acción, destacan la elaboración de una ley autonómica de cambio climático que fije de obligado cumplimiento los objetivos establecidos por la Unión Europea para 2020 de reducción de emisiones (30%), ahorro energético (20%) y fomento de las energías renovables (20%).
Así mismo, facilitar por parte de las administraciones el acceso de los ciudadanos a los recursos y servicios sobre energía y cambio climático, con la creación, por ejemplo, de oficinas insulares de cambio climático, un tipo de "ventanilla única" de todo aquello relativo a esta materia.
También la introducción de medidas de gestión forestal sostenible que mejoren la capacidad fijadora de CO2 de las masas forestales en las Islas Baleares, además de estudiar la posibilidad del aprovechamiento energético de la biomasa.
Por último, la creación de un organismo de participación social sobre las políticas de cambio climático (consejo asesor de cambio climático o similar), además de un consejo de expertos de cariz científico-académico, encargado de estudiar los impactos del cambio climático, vigilar la viabilidad de las políticas en la materia y proponer medidas para la mitigación del cambio climático.