Ginebra, 9 feb.- La delegación de la oposición siria que participa en negociaciones de paz con el Gobierno llegó esta tarde a Ginebra con una composición similar a la de la primera ronda, sin ampliar su representatividad en este proceso.
Esto implica que la Coalición Nacional Siria (CNFROS), la alianza que representa a la oposición, no ha conseguido su objetivo de unir a otros grupos y ampliar su arco, que fue cuestionada por los representante del régimen de Damasco.
Los equipos negociadores del Gobierno y la oposición iniciarán mañana una segunda ronda de conversaciones, con la mediación del diplomático argelino Lajdar Brahimi, enviado especial de la ONU y la Liga Árabe para Siria.
"La delegación será la misma que la última vez", confirmó una portavoz de la oposición.
Las reuniones tendrán lugar en la sede europea de la ONU en Ginebra durante una semana y de ellas se esperan algunos resultados concretos para mantener vivo el proceso.
Durante la primera ronda de negociaciones, que duró ocho días hasta el pasado 31 de enero, se intentaron acordar sin éxito medidas de confianza mutua, como el acceso de ayuda humanitaria a Homs y la liberación de presos políticos.
La delegación gubernamental defiende que primero debe hablarse de cómo detener la violencia de los grupos terroristas, como considera a todas las facciones rebeldes alzadas en armas contra el régimen de Damasco del presidente Bachar al Asad.
Por su parte, la CNFROS exige entrar de inmediato en conversaciones para una transición política.
Fuentes de la ONU confirmaron a Efe que Brahimi se ha reunido este fin de semana con el jefe negociador de la oposición, Hadi al Bahra; y con el ministro sirio de Asuntos Exteriores, Walid al Mualem, quien dirige la delegación gubernamental.
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