Edeka participa en la concentración por las personas con parálisis cerebral en bilbao


La Coordinadora Vasca de Personas con Discapacidad (Edeka) participó este miércoles en la concentración organizada por Aspace Bizkaia, con motivo del Día Mundial de la Parálisis Cerebral 2013, durante la que se leyó un manifiesto, bajo el lema ‘Con las personas, por la ciudadanía’.
Representantes del movimiento asociativo de la discapacidad vasca manifestaron que una de cada 500 personas tienen parálisis cerebral, lo que significa que en el mundo hay 17 millones de personas con esta discapacidad, de las cuales, 120.000 se encuentran en España. Y, según añadieron, si contamos con los familiares y profesionales que los atienden, hablamos de 350 millones de personas que, de una forma u otra, tienen algún tipo de relación con la parálisis cerebral.
En este sentido, explicaron, que estas cifras hacen de la parálisis cerebral la discapacidad motórica más común en la infancia, la cual, además de ser permanente, afecta a cada persona de formas muy distintas. “Una de cada cuatro personas con parálisis cerebral no puede hablar una de cada tres personas no puede caminar, una de cada dos tiene discapacidad intelectual y una de cada cuatro sufre de epilepsia”, apuntaron.
Así, se refirieron a la parálisis cerebral como una discapacidad “muy compleja y singular”, pero que, a pesar de ello, “sigue siendo una discapacidad poco conocida por una gran parte de la sociedad, lo cual contribuye a que las respuestas a sus demandas y necesidades no sean las adecuadas”.
Además, reclamaron que, para lograr el objetivo de tener una vida plena y digna para estas personas, se necesita el apoyo de las administraciones públicas, al mismo tiempo que alertaron de que la crisis económica “no puede convertirse en el argumento que justifique los recortes en el ámbito social, educativo y sanitario”, al mismo tiempo que la austeridad “no puede mermar los apoyos y la atención” que necesitan las personas con parálisis cerebral.
Otro de los aspectos que expusieron en su manifiesto es que el pleno desarrollo de las personas con parálisis cerebral pasa por recibir apoyos en todas las etapas de la vida, desde la atención temprana hasta la atención en residencias, pasando por la escuela, el apoyo a las familias, el empleo, los centros de adultos, el ocio inclusivo o el deporte adaptado.
En este sentido, demandaron que esta intervención debe ser “adecuada” a las necesidades de las personas con parálisis cerebral, integral e interdisciplinar, es decir, “específica”. Por ello, según exclamaron, los criterios economicistas no deben suponer una regresión a modelos generalistas del pasado en el que el número de atendidos primaba sobre la calidad, “que no tienen en cuenta a los que más necesidades tienen”.
“Como ciudadanos de pleno derecho debemos tener garantizados los apoyos necesarios para una integración social real y esta obligación debe recaer en las Administraciones Públicas en primer lugar y en la sociedad civil después, y, para ello, es necesario el conocimiento y la aceptación de las diferencias que tenemos las personas con parálisis cerebral”, concluyeron.

Mostrar comentarios