Educación. Casi la mitad de la reforma podría ser financiada por bruselas


La Unión Europea podría financiar alrededor de la mitad de los costes directos derivados de la implantación de la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (Lomce), cuyo anteproyecto aprobó este viernes el Consejo de Ministros.
En principio, la aprobación de dicha norma estaba prevista para el viernes anterior (9 de mayo), aunque debido a la necesidad de “precisar ciertos detalles técnicos”, este trámite se retrasó.
En rueda de prensa, el ministro de Educación, José Ignacio Wert, anunció que el 95% de los costes directos derivados de la implantación de esta ley podrían ser elegibles por el Fondo Social Europeo (FSE), que en el período 2014-2020 tendrá como prioridades “la lucha contra el abandono escolar y la mejora de la capacitación profesional de los jóvenes”, a fin de impulsar el empleo juvenil.
Por ello, “solicitaremos estas ayudas” a Bruselas, que “con toda seguridad” asumirá entre el 50 y el 65% de su financiación, afirmó. De ahí el retraso en la presentación del anteproyecto, pues tuvieron que especificar en la memoria económica todos aquellos aspectos susceptibles de beneficiarse del FSE.
PRESUPUESTO
Según las previsiones del Gobierno, el coste de implantación directo de la Lomce ascenderá a 408 millones de euros en 3 años, debido fundamentalmente a la sustitución de los Programas de Cualificación Profesional Inicial (con un curso obligatorio y otro optativo) por la Formación Profesional Básica (de dos años obligatorios), y de la transformación de cuarto de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) en un curso de iniciación con dos itinerarios distintos, uno más académico orientado hacia el Bachillerato y otro práctico, dirigido a la Formación Profesional.
Estos cambios implicarán más profesores y también más alumnos en FP, explicó Wert, mientras que el ahorro procederá de la reducción de la oferta de asignaturas en Bachillerato.
La intención del Ejecutivo es que la nueva ley entre en vigor durante el curso 2014-2015, con lo que su implantación tendría lugar a lo largo de tres años (dos cursos académicos).
Así, los costes directos de la Lomce (aquellos que asumiría el Estado) ascenderían a 23 millones de euros en 2014, a 130 durante 2015 y a 255 millones de euros en el último año de puesta en marcha de esta norma.
Sin embargo, el mayor gasto procederá de los "costes de consolidación” de la reforma que, a su vez, variarán en la medida en que se reduzca el abandono escolar y más alumnos permanezcan en el sistema y estudien FP Básica.
El ministerio plantea así tres escenarios que, según el mayor o menor éxito de la ley, deberían darse tres años después de su entrada en vigor.
En el primero se contempla un 25% de alumnos en Bachillerato, un 22,5% en FP Media y un 12,5% en FP Básica; el segundo prevé un 50% de estudiantes matriculados en Bachillerato y un 22,5 y un 12,5% para FP Media y Básica, respectivamente, mientras que en el tercer supuesto se habla de un 55% de alumnos en Bachillerato, un 25% en FP Media y 12,5% en FP Básica.
Estos costes indirectos corresponden a las comunidades autónomas y solo si el Gobierno central decide transferirles más fondos podrán beneficiarse de las ayudas europeas, sobre las que Educación ya ha dicho que permitirán “un ahorro al Estado”, no un aumento de financiación.

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