EEUU trata de reponerse de "Sandy" con tradicional celebración de Halloween

Marc Arcas

Washington, 31 oct.- La celebración de Halloween de este año 2012 se ha encontrado con un escenario tan inesperado como desolador, tras los estragos causados por el paso del ciclón "Sandy" que obligó a aplazar el tradicional desfile de Nueva York, así como las celebraciones en Nueva Jersey.

En las áreas donde el huracán no tuvo efectos tan devastadores, sin embargo, el empeño ciudadano por mantener una tradición tan arraigada como la Noche de Brujas ha hecho que, durante el miércoles, las tiendas de disfraces y complementos se hayan visto abarrotadas de compradores de última hora.

El alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, afirmó en rueda de prensa que previsiblemente la celebración del desfile se trasladará a la próxima semana, aunque no especificó la fecha exacta.

Por su parte, el gobernador del estado de Nueva Jersey, Chris Christie, emitió hoy una orden ejecutiva según la cual se atrasan las celebraciones de Halloween en todo el estado ante el caos que se vive a causa de las consecuencias de "Sandy".

"He tomado esta decisión para minimizar los riesgos", declaró Christie en un comunicado, en el que añadió que, por "necesidad y sentido común", la festividad se pospondrá hasta el próximo lunes 5 de noviembre, un día antes de las elecciones presidenciales en Estados Unidos.

"La tormenta ha hecho que las ventas bajaran mucho durante el lunes y el martes, por lo que hoy prevemos vender todo lo atrasado", aseguró a Efe el propietario de Total Fright, una de las mayores tiendas de disfraces del área de Washington DC, Lorenzo Caltagirone.

"La gente que se quedó en casa aprovechará hoy para comprar", se mostró convencido el comerciante, quien sólo pudo abrir durante cuatro horas en la jornada del lunes, aunque el martes sí trabajó con normalidad.

El otro gran acontecimiento que ha coincidido con las celebraciones de Halloween son las elecciones presidenciales del próximo 6 de noviembre, que se han terminado convirtiendo en un aliado de la festividad.

"Con la proximidad de las elecciones, mucha gente se disfrazará de presidentes históricos de EE.UU. o de los candidatos de este año, el demócrata Barack Obama y el republicano Mitt Romney", aseguró a Efe la vecina de Virginia Judy Grase, que se encontraba haciendo las compras de última hora para la Noche de Brujas.

"Aún así, yo estoy pensando en disfrazarme de calabaza", apuntó Grase, quien tiene previsto pasar la noche del miércoles con sus compañeros de trabajo, con los que celebrará un concurso de disfraces en el que el primer premio serán 100 dólares.

Las máscaras de Romney y Obama, así como las de presidentes históricos como John F. Kennedy, Ronald Reagan y George W. Bush causan sensación en las tiendas de disfraces e, incluso, las más atrevidas, convierten a los políticos en demacrados "zombies".

Una de las más curiosas es la de una máscara con forma de calabaza -tan típicamente asociada a Halloween- en la que se imprime la cara del presidente estadounidense, Barack Obama.

Otra de las compradoras, la residente en Florida Ashley Carlson, indicó que, "nada más bajar del avión" al aterrizar en uno de los aeropuertos de Washington, se dirigió a la tienda a buscar un disfraz para esta noche.

"¡Seré superwoman!", reveló a Efe, entusiasmada y mostrando el paquete con el disfraz que acababa de adquirir.

Carlson se sumará así a una tendencia generalizada según el propietario de la tienda Total Fright, quien explicó que los disfraces más vendidos de este año han sido los de superhéroes como Supermán, Ironman, Thor y Capitán América.

Como siempre, también ha habido espacio para los disfraces de actualidad, como el del popular personaje de Barrio Sésamo "Big Bird", conocido como Gallina Caponata en España y Aberlardo Montoya en Latinoamérica, y que ya ha sido una de las sensaciones de los debates entre los candidatos a la Presidencia de EE.UU.

Azotados por una de las peores catástrofes naturales de los años recientes, los ciudadanos de EE.UU. tratan de, a través del tradicional Halloween, reponerse del duro golpe que ha ocasionado una tormenta que ha sido la causante de, por lo menos, medio centenar de víctimas mortales.