El independiente Tamam Salam se perfila como nuevo primer ministro libanés

Beirut, 6 abr.- El presidente del Líbano, Michel Suleiman, cierra hoy las consultas con los grupos parlamentarios para designar a un nuevo primer ministro, que será, salvo sorpresa mayúscula, el diputado independiente Tamam Salam.

Salam, parlamentario por Beirut y procedente de una familia política tradicional suní, se ha asegurado el apoyo de las Fuerzas del 14 de Marzo (coalición antisiria), así como de la gran mayoría de sus antagonistas, como el grupo chií Hizbulá.

Tamam Salam reemplazará en el cargo al anterior primer ministro, Nayib Mikati, quien dimitió hace dos semanas por desavenencias entre los miembros de su Gobierno, y tendrá como principales retos preparar las próximas elecciones parlamentarias de junio y mantener la precaria calma en el Líbano ante la guerra civil en Siria.

Después de que terminen hoy las consultas, en las que también ha participado el propio Salam, está previsto que el presidente del Parlamento, Nabih Berri, acuda al Palacio Presidencial y desde allí se convoque al candidato con más apoyos para anunciarle su designación.

Salam, de 67 años, está considerado un político moderado, y sucede a su padre como jefe del Gobierno libanés, puesto que ocupó cuatro veces entre 1952 y 1973.

El previsible nuevo primer ministro fue titular de Cultura entre 2008 y 2009 en el gobierno de Fuad Siniora y está bien relacionado con el influyente líder de la comunidad suní Saad Hariri.

En una entrevista publicada hoy por el periódico "As-Safir", el futuro primer ministro afirma que está abierto a todos los poderes políticos durante el proceso de formación del nuevo gobierno.

"Mi prioridad es lograr un acuerdo sobre la elaboración de una nueva ley electoral y la celebración de los comicios", previstos inicialmente para el 9 de junio, aunque ayer el ministro del Interior en funciones, Maruan Charbel solicitó que se pospongan una semana.

Todos los intentos para elaborar una ley electoral han fracasado por las discrepancias entre los miembros de las Fuerzas del 14 de Marzo y la corriente del 8 de Marzo, encabezada por Hizbulá y sus aliados chiíes y cristianos.

"El nuevo gabinete debe trabajar para establecer la paz civil y la reconciliación nacional, que allanará el camino a la celebración de las elecciones", agregó Salam.