Empresarios estudian vías para reinsertar a guerrilleros de FARC, dice diario

  • Empresarios e industriales colombianos estudian vías para favorecer la reinserción de los más de 8.000 guerrilleros de las FARC, en previsión de que prospere el acuerdo de paz entre el Gobierno y esa guerrilla, reveló hoy la versión digital del diario El Espectador.

Bogotá, 14 oct.- Empresarios e industriales colombianos estudian vías para favorecer la reinserción de los más de 8.000 guerrilleros de las FARC, en previsión de que prospere el acuerdo de paz entre el Gobierno y esa guerrilla, reveló hoy la versión digital del diario El Espectador.

Ese rotativo, que no citó el nombre de las fuentes consultadas, aseguró que estos estudios han sido liderados por el empresario azucarero Henry Éder, quien es padre del consejero presidencial para la Reintegración, Alejandro Éder, y el presidente de la Asociación Nacional de Industriales (Andi), Luis Carlos Villegas.

Villegas es uno de los cinco negociadores del Gobierno que participará esta semana en el inicio de los diálogos con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en Oslo y fue elegido en representación del empresariado también por su experiencia en los fallidos intentos de paz del Gobierno de Andrés Pastrana (1998-2002).

Según El Espectador, el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, les pidió colaboración de cara a la consecución de la paz y ellos han movilizado al sector privado para generar un ambiente favorable a la reinserción.

Al parecer, los empresarios partirán de una idea principal: desarrollar una "marca paz" en diferentes artículos de origen colombiano que permita involucrar al comprador, a través de un porcentaje del precio, en las garantías laborales para desmovilizados en el periodo del posconflicto.

Entre otras iniciativas, también se contempla la posibilidad de comprar tierras en zonas de influencia guerrillera para constituir empresas agrícolas o de manufactura que puedan cobijar laboralmente a los futuros exrebeldes.

Uno de los industriales consultados por el periódico indicó que "de nada sirve ver a unos jefes de la guerrilla en el Congreso o participando activamente en la política, mientras el resto sigue pensando en las rutas del narcotráfico, la minería ilegal, las redes de prostitución o el contrabando de armas".

Por eso entendió que es preciso "intervenir creando empresa" para acoger al gran grupo de insurgentes con origen campesino y analfabeto que pueden convertirse en mano de obra "poco calificada" para actividades primarias.

El presidente de la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC), Rafael Mejía, incluso consideró recientemente que el éxito del proceso de paz puede significar un fortalecimiento del sector rural.

Sin embargo, una encuesta realizada el pasado mes de septiembre a unos 200 ejecutivos colombianos indicó que aunque el 77 % de los preguntados apoya el proceso de paz, la mayoría no estaría dispuesto a asumir sus costos ni a contratar a exguerrilleros.

Según el sondeo, el 65 % de los encuestados no pagaría más impuestos para financiar las obligaciones derivadas de un proceso de paz, frente al 34 % que sí lo harían.

Además, el 49 % tampoco contrataría a integrantes de las FARC desmovilizados tras un eventual acuerdo de paz, cuando el 40 % sí estaría de acuerdo.

Mostrar comentarios