México, 23 ene.- El secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano, Víctor René Rodríguez, confió hoy en que la próxima visita del papa Benedicto XVI al país sirva de inspiración para que los delincuentes reconsideren su postura y cambien.
"No se trata de una tregua, sino de un tiempo de cambio, de conversión, que los grupos que practican la delincuencia reconsideren su postura ante la sociedad y ante la patria", dijo el prelado en una entrevista.
"Personajes como su santidad el papa honran con su presencia nuestro país y, por tanto, en estos días el llamado no es solamente de que haya tregua, sino un cambio en el que debemos participar todos", expuso.
Rodríguez se refirió así a la ola de violencia que sufre México, que ha dejado más de 47.000 muertes desde diciembre de 2006 a septiembre de 2011, según datos oficiales.
"La visita del papa traerá, además de bendición por su presencia, un nuevo entusiasmo en asumir nuestro compromiso como cristianos y como mexicanos para darle a nuestro país el futuro que todos anhelamos", manifestó.
A falta de dos meses para la visita de Benedicto XVI al estado central de Guanajuato, que se celebrará del 23 al 26 de marzo, Rodríguez amplió a Efe algunos detalles del programa en el que trabaja el Episcopado.
A su llegada a León será recibido en el aeropuerto por jóvenes que interpretarán música folclórica mexicana y acudirá a la residencia de las religiosas del Colegio Miraflores, donde va a hospedarse durante su estancia, atendido por las propias religiosas mexicanas.
El sábado 24 de marzo se trasladará a la Casa del Conde Rul, en la ciudad de Guanajuato, capital del estado, para encontrarse con el presidente Felipe Calderón.
La reunión será privada y después se ampliará a la familia de Calderón y más tarde a una comunidad de niños y jóvenes que viven en condiciones difíciles y que serán bendecidos por el pontífice.
La mañana del domingo 25 de marzo se celebrará un acto masivo en el Parque Guanajuato Bicentenario del municipio de Silao, al que Benedicto XVI llegará en el popular "papamóvil" y hará un recorrido para que los fieles puedan verlo de más cerca.
Allí se celebrará una eucaristía a la que asistirá un grupo de representantes de los tres poderes gubernamentales, así como grupos de indígenas, mujeres, niños y discapacitados.
"La eucaristía tendrá un tinte humano donde el Santo Padre se acercará con su bendición a todo el pueblo de Dios, y después habrá un ángelus, como suele hacer los domingos desde El Vaticano", explicó Rodríguez, quien calculó que asistirán al evento unas 400.000 personas.
En la tarde acudirá a la Catedral de León, para reunirse con obispos de México y representantes de episcopados de América Latina.
La seguridad del papa y su comitiva estará a cargo del Estado Mayor Presidencial, mientras que serán las autoridades locales y estatales las que tendrán que garantizar la seguridad de las personas que acudan a los eventos.
"Podemos tener la confianza y la seguridad de que no tendremos ningún problema. El Santo Padre goza del cariño y el respeto de todos los mexicanos. Creemos que habrá cierta tregua o respeto de los grupos difíciles", apuntó Rodríguez.
Una de las labores más complicadas, explicó, es la de reclutar a los miles de voluntarios que van a colaborar en la organización de la visita.
"La logística nos ocupa mucho; solamente para vallas (humanas) necesitamos 25.000 jóvenes que necesitan un esquema de reclutamiento, una etapa de preparación y, cuando estén aquí, hospedaje, transporte y alimentación", apuntó.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios