Europa despide a Wilfried Martens, un gran estadista belga y de la UE

Bruselas, 19 oct.- Europa despidió hoy a Wilfried Martens, presidente del Partido Popular Europeo y ex primer ministro belga, en un servicio fúnebre en la catedral de San Bavón de Gante al que asistieron numerosos líderes para rendir homenaje a quien fue un gran estadista y uno de los padres de la Bélgica federal.

Martens falleció el pasado día 9 en su domicilio de Lokeren (norte de Bélgica) a los 77 años de edad, un día después de anunciar que dejaba temporalmente su cargo al frente del Partido Popular Europeo (PPE) por motivos de salud, afectado por un cáncer de páncreas.

Bélgica le dio al servicio religioso el rango de funeral de Estado con honores militares frente al ataúd depositado a primera hora de la mañana en la plaza de la catedral.

Cientos de ciudadanos se acercaron al lugar para darle su último adiós y ofrecerle sus respetos, acompañando en su dolor a la familia del político democristiano flamenco, que deja viuda, Miet Smet, y cinco hijos de dos matrimonios anteriores con Lieve Verschroeven e Ilse Schouteden.

Numerosos miembros del actual Gobierno belga, políticos belgas y europeos, jefes de Estado y de Gobierno y líderes de las instituciones europeas acudieron al servicio fúnebre, entre ellos el primer ministro belga, Elio Di Rupo; la canciller alemana, Angela Merkel, y los presidentes del Consejo Europeo y de la Comisión Europea, Herman Van Rompuy y José Manuel Durao Barroso.

Varios líderes belgas y europeos rindieron en los panegíricos que hicieron homenaje a Martens, presidente del PPE desde 1990 hasta su muerte.

El presidente del grupo popular en la Eurocámara, Joseph Daul, en quien Martens delegó sus funciones cuando dejó su cargo antes de morir, dijo que el ex primer ministro belga dedicó su vida a servir a Europa, una Europa que quería que avanzara.

Di Rupo, por su parte, destacó "la huella indeleble" que Martens ha dejado en Bélgica y en Europa, y la "fidelidad a sus convicciones y sus valores".

La próxima semana, cuando se celebrará en Bruselas la reunión previa a la cumbre europea de esa fuerza política, la silla de Martens "estará vacía", pero se llenará de las ideas y los ideales comunes que tanto ha defendido el fallecido político belga, señaló por su parte Van Rompuy.

Defensor de los valores cristianos, Martens fue presidente de las juventudes y secretario general del Partido Popular Cristiano flamenco (CD&V) antes de convertirse en primer ministro belga en 1979 y fue el arquitecto del actual PPE.

Martens, dijo Durao Barroso, ha tenido "un profundo impacto" en el diseño político europeo durante varias décadas y sus "fuertes convicciones y valores sólidos" le permitieron "unir a la gente, tanto en su país como en Europa" y forjar consensos.

"Para mí, Martens ha sido lo que entendemos por un político europeo", dijo por su parte Merkel sobre quien fue el primer ministro en Bélgica que más Gobiernos dirigió, nueve, y durante más tiempo, más de doce años en total.

A excepción de una interrupción de ocho meses en 1981, ocupó el puesto al frente del Gobierno belga de 1979 a 1992, un periodo en el que demostró su capacidad para combinar todo tipo de coaliciones en años marcados por la inestabilidad política en Bélgica.

Martens, subrayó Merkel, fue "con todo el alma flamenco, belga y europeo" y "se guió por la convicción de que todas las regiones y todos los Estados europeos, cuán diferentes puedan ser, deben estar unidos y que, a través de su unión en la Unión Europea, son más fuertes".