Expertos alertan de que trastornos de próstata y de erección van emparejados

  • La Asociación Española para la Salud Sexual (AESS) ha advertido hoy, Día Europeo de la Salud Sexual, sobre la relación existente entre los trastornos de la próstata y de la erección y ha animado a los varones que no se resignen a perder su actividad sexual debido a este problema.

Madrid, 14 feb.- La Asociación Española para la Salud Sexual (AESS) ha advertido hoy, Día Europeo de la Salud Sexual, sobre la relación existente entre los trastornos de la próstata y de la erección y ha animado a los varones que no se resignen a perder su actividad sexual debido a este problema.

Según el Atlas de la disfunción eréctil en España, más de dos millones y medio de españoles padecen este trastorno, de los que sólo un 23 por ciento están diagnosticados y la mitad de ellos (unos 300.000) se somete a algún tipo de tratamiento.

El "emparejamiento" entre las enfermedades de la próstata y los trastornos de la erección viene avalado por diversos estudios realizados en España, ha explicado la AESS en un comunicado.

Así, cuanto más graves son los síntomas por sufrir hiperplasia benigna de próstata (crecimiento de hasta el 20 % del tamaño de esta glándula), como dificultad para orinar, necesidad de ir más a menudo al baño o sensación de no vaciar la vejiga, hay mayor probabilidad de padecer disfunción eréctil y disfunción eyaculatoria.

Las últimas investigaciones científicas señalan que la relación entre ambas patologías puede deberse a cambios en la vascularización, es decir, a una disminución del flujo sanguíneo arterial y de irrigación de la próstata, el pene y la vejiga.

Además, la disfunción eréctil puede actuar como síntoma centinela, avisando de la existencia de otros trastornos graves como pueden ser las enfermedades cardiovasculares.

Desde la AESS se anima a todo varón que tenga dudas sobre su estado de salud urológica y sexual a que consulte con su médico.

El tratamiento farmacológico es la primera opción frente a la disfunción eréctil, aunque casi un 30 % de los pacientes no responde a esta terapia.

Para estos varones, los implantes de pene pueden ser una alternativa.

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