La frescura de las estrellas en duda tras la primera fase de la Eurocopa

Se acercan o incluso superan los 60 partidos esta temporada y eso seguramente se hace sentir: a las estrellas de la Eurocopa-2016, desgastadas en sus clubes, les cuesta cambiar el aire con sus selecciones, evidenciando una carencia de frescura física y mental.

Ya han pasado tres semanas desde la tanda de penales que definió la final de la Champions League entre Real Madrid y Atlético en Milán, con triunfo merengue. Pero para Sergio Ramos, imperial frente al portero del Aleti en su gol, parece una eternidad.

Contra Croacia, el capitán del Real y la Roja parece haber perdido su sangre fría en ese ejercicio: Danijel Subasic le atajó un penal que podría haberle cambiado la historia al camino de la Furia, que terminó perdiendo ese duelo 2-1 y ahora enfrentará a la dura Italia.

Su compañero Cristiano Ronaldo tampoco se mostró decisivo con Portugal después de 237 minutos de impotencia, que incluyeron un penal fallado.

Pero no fueron los únicos en haber dado signos de fatiga en la primera ronda de Francia-2016. Zlatan Ibrahimovic, Robert Lewandowski, David Alaba o Kevin De Bruyne son otros ejemplos.

"No tengo respuestas sobre el rendimiento decepcionante de De Bruyne. Está cansado después de una temporada larga", había declarado su seleccionador Marc Wilmots, después de la derrota 2-0 de los Diablos Rojos contra Italia en el debut de la Eurocopa, en el que el volante del Manchester City casi no la tocó.

"Es algo lógico", explica a la AFP Alexandre Marles, exdirector de alto rendimiento en el París SG (2013-2014). Porque como lo subraya el doctor Jean-Jacques Amprino, exmédico del Lyon (2000-2008), "cuando un jugador se acerca o supera los cincuenta partidos (jugados de forma total) por año, sus contadores están en rojo. Hay un sobrecalentamiento" de su motor, explica.

Según los especialistas, no existen milagros, pero sí hay métodos para ayudar a "enfriar esos motores recalentados", como hacer rotar los equipos cuando el entrenador tiene margen para ello, explicó Amprino. Eso fue lo que hizo Antonio Conte, de hecho, en el duelo del miércoles ante Irlanda (derrota 1-0), cuando ya tenía su pase amarrado.

Antoine Griezmann y Paul Pogba, dos jugadores clave en Francia, también pudieron descansar en el torneo. Didier Deschamps hizo lo mismo que Conte, incluyéndolos algunos minutos en los últimos dos encuentros.

Pero hay otros factores para recuperarse más rápido a la cadena de partidos cada tres o cuatro días en un torneo grande.

"Es importante pasar por las manos del kinesiólogo y hacerse eventualmente baños de agua helada", apunta Alexandre Marles, miembro del cuerpo técnico de Francia en la Eurocopa-2012.

Gareth Bale (3 goles) o Dimitri Payet (2) forman parte de los jugadores con mejor rendimiento del torneo, y la explicación es simple: el galés y el francés, sentidos respectivamente en una pantorrilla y un tobillo en la temporada, tuvieron la "suerte" de tomar descanso para recuperarse de sus lesiones, explica Amprino.

Para los que resisten, el peligro se retrasa al futuro cercano.

"Pueden hipotecar gran parte de la próxima temporada", según Marles, precisando que esos jugadores pueden estar peor en septiembre u octubre que durante una Eurocopa o un Mundial.

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