Gil Tamayo: el cura pacense al que se le echará de menos en su parroquia

  • Los muchos feligreses que esta mañana se han acercado a la parroquia San Juan Bautista de Badajoz han recibido con alegría el nombramiento de su párroco como secretario general de los obispos españoles, aunque también con tristeza al tener que decirle adiós al que, para ellos, es un sacerdote bueno.

José Luis Real y Gorka Ruiz

Badajoz, 20 nov.- Los muchos feligreses que esta mañana se han acercado a la parroquia San Juan Bautista de Badajoz han recibido con alegría el nombramiento de su párroco como secretario general de los obispos españoles, aunque también con tristeza al tener que decirle adiós al que, para ellos, es un sacerdote bueno.

A pesar de que la mañana arrancaba como un día normal en esta parroquia, una de las más importantes de Badajoz, la alegría llegaba al conocerse la noticia de que su párroco, José María Gil Tamayo, había sido elegido, en primera votación, nuevo secretario general de la Conferencia Episcopal Española (CEE).

El propio Gil Tamayo se ha enterado de la noticia en la parroquia junto a su madre, que ha roto a llorar, y enseguida ha hecho las maletas y se ha trasladado a Madrid, donde mañana ofrecerá una rueda de prensa.

Su compañero de parroquia, el sacerdote Emilio Rodríguez Benítez, ha desayunado esta mañana como suele hacer habitualmente con Gil Tamayo y, precisamente, le ha transmitido su confianza plena en que sería elegido para el cargo ya que, entre otras cuestiones, su nombre era el que aparecía primero en la terna propuesta, según ha explicado en declaraciones a Efe.

Más sorprendidos se han mostrado los feligreses, que sienten verdadero cariño por su párroco pese a que solo llevaba algo más de un año en esta iglesia, a la que había llegado en julio de 2012 tras una labor pastoral que, básicamente, se ha desarrollado en Extremadura.

Uno de ellos, Juan Gómez ha resumido el sentimiento general que existe en la parroquia: "Me alegro mucho por él, aunque se le echará de menos".

Rodríguez Benítez ha destacado el "gran sentido pastoral" del nuevo secretario general de los obispos españoles y ha explicado que siempre está dispuesto para la confesión.

"Se caracteriza por su cordialidad y disponibilidad; además, se ha movido siempre bien en los ambientes oficiales", ha añadido.

Nacido en Zalamea de la Serena (Badajoz), y de 56 años, es como muchos ilipenses, un hombre a quien no le importa afrontar nuevos destinos; no en vano, era su segunda etapa en la capital pacense y ha ejercido su labor pastoral en distintas parroquias rurales.

La parroquia de San Juan Bautista es una de las más importantes en Badajoz, por su historia y ubicación -en el centro de Badajoz, junto al antiguo Hospital Provincial o al Teatro López de Ayala, entre otros-, y en ella se congregan un gran número de feligreses.

En ella se han dado cita además, por una u otra causa, personalidades de la vida política, social o cultural no solo de la ciudad, sino de toda la comunidad autónoma.

El nuevo secretario general de la Conferencia Episcopal será el encargado de dar voz a los obispos españoles durante los próximos 5 años.

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