Por tercer año consecutivo, la Duquesa de Cambridge ha sido coronada como el icono de belleza más influyente del Reino Unido. La mujer del príncipe Guillermo vuelve a liderar una lista de bellezas inglesas gracias a su impecable estilo y a ser una auténtica creadora de tendencias.
Como ya hemos visto en más de una ocasión todo lo que se pone agota existencias, por eso no es de extrañar que la encuesta realizada por la tienda de moda Superdrug a las mujeres británicas haya resultado serKate Middleton el icono de belleza más influyente arrasando con un 30 por ciento de los votos.Simons Comins, director comercial de la firma, ha declarado que "Kate Middleton se ha asegurado un lugar en los corazones de la nación".El año de Kate Middleton
En 2013, Catalina, que ha cumplido 31 años, ha vivido su año más emotivo ya que se ha convertido en mamá por primera vez. Durante los meses del embarazo, Kate apostó por cómodos vestidos sueltos o con corte bajo el pecho y abriguitos rectos a juego en tonos pastel y sus tradicionales tocados a juego para los eventos de día. Llegó a ser elegida también la futura mamá mejor vestida del mundo.
En el mes de julio, Kate daba a luz en Londres al pequeño Jorge ante una gran marejada de fotógrafos llegados de todos los países y conquistaba de nuevo al mundo entero posando para los medios a las pocas horas de dar a luz y luciendo aún la tripita postparto. Con un vestido de lunarcitos en tono azul baby homenaje a su suegra Lady Di, Catalina volvió a robar una sonrisa a todos los curiosos que la esperaban mostrando su lado más natural y cercano.
Pero también enamoró a los fotógrafos cuando reapareció a las pocas semanas de tener a su hijo. Kate aparecía por sorpresa en un evento campestre, vestida de manera informal y con la sonrisa eterna que le caracteriza.
El 13 de septiembre, la duquesa acompañaba a su marido Guillermo a su primer acto nocturno ybrillaba con luz propia con un espectacular vestido brocado de Jenny Packham, recubierto por lentejuelas plateadas y con cristales incrustados. Unas lujosas sandalias brillantes de Jimmy Choo con plataforma fueron el calzado elegido, algo raro en ella que no suele llevar tacones demasiado altos.
El 23 de octubre fue otro de los momentos en los que Kate se coronó como icono de la elegancia. Para el bautizo de su hijo, Kate eligió un vestido en tono crema de Alexander McQueen, que completó con un discreto tocado a juego y colocado en el lado derecho de la cabeza de la firma Jane Taylor y con un precio de 755 libras.El pelo decidió dejarlo suelto y sólo lucía unos pendientes con colgante en oro.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios