La situación mejora en el oriente asturiano, pero preocupa la crecida del Nalón

  • La Morgal (Asturias).- La situación creada por las inundaciones causadas por las intensas lluvias registradas en Asturias ha comenzado a normalizarse en los municipios de la comarca oriental de la región y la principal preocupación se centra ahora en la crecida del río Nalón, especialmente en su último tramo.

La línea ferroviaria entre Asturias y Cantabria permanecerá cortada varias semanas
La línea ferroviaria entre Asturias y Cantabria permanecerá cortada varias semanas

La Morgal (Asturias).- La situación creada por las inundaciones causadas por las intensas lluvias registradas en Asturias ha comenzado a normalizarse en los municipios de la comarca oriental de la región y la principal preocupación se centra ahora en la crecida del río Nalón, especialmente en su último tramo.

Estos datos han sido facilitados hoy en rueda de prensa por el presidente del Principado y el delegado del Gobierno en Asturias, Vicente Álvarez Areces y Antonio Trevín, respectivamente, en la sede del Centro de Emergencias del 112 y de Bomberos de Asturias.

Las previsiones meteorológicas apuntan a una mejoría para las próximas horas en las que se reduciría la intensidad de las lluvias, lo que tendrá especial incidencia en los ríos de la comarca oriental, más cortos y rápidos, lo que provoca que, en caso de desbordamiento, éste se produzca de forma torrencial.

En el caso del Nalón, que ha obligado a desalojar los centros escolares de Laviana y cinco colegios de Langreo, se han alcanzado "niveles inusuales de agua" aunque, al tratarse de un río muy encauzado, su crecida se produce de forma paulatina.

No obstante, el Nalón ha comenzado a anegar lentamente las vegas que lo rodean, así como viviendas de las localidades de Trubia, Argame y Ribera de Arriba.

El Gobierno asturiano, que activó este mediodía la situación 2 del Plan de Inundaciones, lo que ha permitido desplazar a Arriondas, la localidad más afectada de la comarca oriental, a la Unidad Militar de Emergencias (UME), no contempla la posibilidad de elevar al máximo el nivel de alerta, que conllevaría la intervención del Estado.

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