Las españolas deciden ser madres cada vez a mayor edad

Ser madre en estos tiempos que corren siempre es difícil, más si cabe cuando es una mujer joven la que decide emprender el sueño de la maternidad. No en vano el desempleo juvenil en España se dispara hasta el 67,28% según la Encuesta de Población Activa y en la franja de edad situada entre los 20 y los 24 el paro ronda aproximadamente la mitad (48,88%).

Son sólo algunos de los datos que explican que las mujeres en general y las españolas en particular deciden ser madres a mayor edad. Si a principios de los 90 ellas tenían su primer hijo a una media de 26,8 años, en 2013 esta media se elevaba hasta los 30,4 años, 3,6 años más tarde. De esta forma, España se convierte en uno de los países occidentales en los que más tarde -de media- se es madre, al nivel de naciones como Suiza.

Como apuntábamos en líneas precedentes suelen primar los motivos económicos. Desde el Instituto de Política Familiar apuntan que "el mileurismo" ha retrasado sine diela emancipación de los hijos que en el futuro serán padres.

Asimismo otro factor a tener en cuenta lo encontramos en la evolución del proceso educativo. La extensión del mismo mediante los Master, doctorados y en definitiva todo estudio de postgrado ha impuesto la 'obligatoriedad' de no tener hijos hasta que la situación económica de la pareja no sea lo suficientemente sólida.

A esta situación hay que añadir por norma general el escaso apoyo prestado por la empresa española a todas aquellas profesionales que desean combinar su carrera con la maternidad. La conciliación familiar en España brilla por su ausencia. Finalmente, las mujeres van retrasando por un motivo u otro su decisión hasta que es la propia edad la que marca una pregunta definitiva: ahora o nunca.

A partir de los 35 años las mujeres producen menos óvulos, un efecto que se intensifica entre los 38 y 42 años. A partir de entonces la fecundidad no sólo se reduce drásticamente sino que a partir de los 40 un embarazo conlleva riesgos vitales para la propia mamá. Asimismo, desde los 38 años la probabilidad de trisomía 21 -o síndrome de Down- o abortos espontáneos se eleva considerablemente. A más edad, peor calidad del óvulo.Congelar los óvulos

Ante semejante panorama, muchas mujeres deciden congelar sus óvulos. Grandes compañías tecnológicas como Apple yFacebookhan añadido un incentivo extra para atraer y mantener el escaso número de mujeres en Silicon Valley: la congelación de óvulos a las empleadas que lo soliciten. En España se permite esta práctica a partir de los 18 años y aunque no existe ningún mandato legal al respecto, algunos centros privados marcan en los 50 años el tope para implantar un óvulo previamente congelado y fecundado en el cuerpo de una mujer.

El procedimiento permite a las mujeres congelar parte de sus óvulos durante sus años más fértiles, que a menudo coinciden también con el periodo más productivo de sus carreras profesionales.

El coste del procedimiento puede rondar los 20.000 dólares, ya que generalmente son necesarios dos ciclos de estimulación ováricos para la toma de muestras y los seguros desaludestadounidensesno suelen cubrir los costes.