Los chinos mayores de 45 años, entre la mala salud y la pobreza, dice estudio

Pekín, 1 jun.- Un reciente estudio demográfico en China muestra que tres de cada cuatro chinos de más de 45 años tiene precarias condiciones de salud, mientras que uno de cada cuatro vive por debajo del nivel de pobreza.

El estudio, difundido hoy por el diario "South China Morning Post" (SCMP), pone de relieve uno de los grandes retos a los que se enfrenta el Gobierno del presidente Xi Jinping: proporcionar atención médica adecuada a un sector de población que no para de crecer frente a la disminución de los jóvenes.

Para elaborar este estudio sobre la salud y la jubilación en China han efectuado encuestas a 17.708 personas de 45 o más años -con una mayoría que supera los 60- procedentes de 28 provincias.

Según sus conclusiones, una de cada cuatro personas de 60 años o más vive por debajo de la línea de la pobreza marcada por el Gobierno de la República Popular en 2.433 yuanes por año (unos 396 dólares, 300 euros).

Los expertos señalan que cerca del 38 por ciento tienen dificultades para realizar tareas diarias comunes por sí solos.

Destacan también que un 54 por ciento son hipertensos, y que al 40 por ciento de ellos no se le había diagnosticado la enfermedad antes de los exámenes médicos realizados durante el estudio.

Los analistas inciden en la peor situación de las mujeres en cuanto a problemas psicológicos como la depresión. Más del 48 por ciento de ellas sufren síntomas depresivos -como perturbación del sueño o sentimiento de miedo- frente a un 32 por ciento de hombres.

Ante esta situación, Pekín se ha puesto como objetivo impulsar un programa sanitario que proporcione una atención adecuada este sector de población, además de ayudas a la jubilación.

En las grandes ciudades, según el diario "SCMP", el "déficit" es más que obvio como en el caso de la capital, donde recientemente, se registró la solicitud de más de 10.000 personas para ingresar en un centro de salud que sólo dispone de 1.100 camas.

Actualmente, la principal urbe china cuenta con 450.000 personas mayores que viven alejadas de sus familias, pero sólo existen 215 centros públicos y 186 privados.

Frente a la falta de servicios públicos, la encuesta destaca "el gran papel" que están jugando las familias, si bien también alerta de que este apoyo irá a menos debido a la disminución de la población joven, por lo que se requerirá impulsar más programas sociales públicos.

"El sistema de salud necesita hacer un trabajo mejor para proveer a la gente de una cobertura suficiente, que diagnostique el riesgo de enfermedades crónicas y mejore su calidad de vida", declaró uno de los investigadores de la encuesta y profesor de la Universidad de Hong Kong, Albert Park, al citado diario con base en Hong Kong.