Los rumanos necesitarán un permiso para trabajar en España

La situación para los inmigrantes rumanos que lleguen a partir de ahora a España cambia radicalmente. España ha decidido volver a requerirles un permiso para poder trabajar en el país, una medida que el Gobierno ha calificado de "temporal" y motivada estrictamente por las condiciones actuales del mercado de trabajo.

La resolución parte del Consejo de Ministros de este viernes y, según se ha explicado, no repercutirá sobre los rumanos que ya están trabajando en España.

El Gobierno instrumentará esta medida mediante la reactivación del período transitorio en materia de acceso al mercado de trabajo español para ciudadanos rumanos. En 2008 había decidido eximirlos del permiso, tras el ingreso de Rumanía a la Unión Europea.

De esta forma, según el Ejecutivo, los ciudadanos rumanos que quieran trabajar en España por cuenta ajena tendrán que tramitar una autorización previa, que se basará en la existencia de un contrato de trabajo.

El Gobierno ha insistido en que se trata de una decisión "estrictamente técnica" que se basa en consideraciones internas generadas por la situación del mercado laboral en España, y que se enmarca en la política migratoria general, que pretende "ajustar los flujos de entrada a las necesidades del mercado de trabajo".

La medida tendrá carácter temporal y será evaluada de forma continua para evaluar el mercado laboral español, ha informado el Gobierno, que ha informado de estas medidas a las autoridades rumanas.

De hecho, el Gobierno de Rumanía ha comunicado que entiende que esta decisión es "estrictamente técnica" y que no tiene "ninguna connotación política", y a través de su Embajada en Madrid ha subrayado que cuenta con el compromiso de España de que la medida será "temporal" y su aplicación estará sujeta a la evolución del mercado de trabajo.

Por su parte, la Comisión Europea ha asegurado hoy que España no puede introducir nuevas restricciones a la entrada en el país de trabajadores rumanos.

El portavoz del Gobierno español, José Blanco, ha recordado que el propio Tratado de Adhesión de Rumanía a la UE preveía un período transitorio, hasta 2014, para la plena integración de los trabajadores de este país.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Blanco ha observado que España optó hace varios años por "flexibilizar"las condiciones de entrada de los rumanos que querían trabajar en España, pero que la situación actual del mercado laboral recomienda reactivar aquella moratoria.

El portavoz del Ejecutivo español ha recordado que esa moratoria sigue vigente en otros países europeos, y ha incidido en que existen "razones objetivas" para activarla también en España.

Según los datos facilitados por el ministro, en España residen unos 800.00 rumanos, de los cuales el 30 por ciento están en situación de desempleo.

"La libertad de circulación está asegurada"

El ministro de Trabajo e Inmigración, Valeriano Gómez, señaló hoy que la medida se debe a "motivaciones estrictamente laborales" y espera que dure "el menor espacio de tiempo posible".

Durante su intervención en los Cursos de Verano de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) en San Lorenzo de El Escorial, el ministro indicó que la libertad de circulación está asegurada y que se trata de "una decisión de orden laboral vinculada a la situación excepcional de nuestro mercado de trabajo".

Gómez explicó que la moratoria no afecta al trabajo por cuenta propia, ni a los ciudadanos de origen rumano que se encuentren actualmente trabajando en España ni a los que han perdido su empleo.

De esta forma el ministro destacó que afectará sólo en el futuro a "aquellos ciudadanos rumanos que pretendan trabajar en España", ya que "lo tendrán que hacer con un permiso de trabajo previo".

Asimismo explicó que "cuando comenzó a aplicarse la moratoria inicial primera, la población rumana en España era algo superior a los 200.000" mientras que "cuando adoptamos la restauración de la moratoria está en este momento en 870.000 personas".

Según dijo, "el acuerdo establece la creación de un grupo de trabajo entre las autoridades rumanas y españolas para ir evaluando la situación" y agregó que la medida "no puede superar el año 2014", ya que es "la fecha límite prevista para que cualquier país de la Unión pueda tener alguna moratoria para la libertad de trabajo".