Mark Owen quiere volver a empezar

El cantante de Take That ha vendido su propiedad de Wandsworth, en el suroeste de Londres, por 2,2 millones de euros. El artista quiere empezar de nuevo con su familia tras aguantar un duro 2010 en el que confesó que le era infiel a su mujer y que era alcohólico.Owen y su esposa Emma Ferguson, que se casaron en 2009 después de cinco años de noviazgo, compraron la casa, de tres habitaciones y dos baños, por 1,7 millones de euros en 2006.Durante el tiempo que vivieron allí, la pareja tuvo a sus dos hijos, Elwood de 4 años, y Willow Rose, dos. Ahora la familia busca una casa nueva por la misma zona. Según documentos de Land Registry, la casa fue vendida en febrero por una cifra inferior a 2,3 millones de euros.Fans del famoso cantante se sorprendieron mucho en marzo de 2010 cuando Owen admitió que había sido infiel a Ferguson con al menos diez mujeres a lo largo de su relación.En el momento, manifestó: "Ella me quiere y yo le traiciono. Lo siento mucho. He sido un idiota, un gili... un gili... Todo y más. Es sobre mí, sobre mis errores, no se puede culpar a nadie más. No sé cuantas chicas serían en total, quizá unas diez".Poco después, la estrella se apuntó a la clínica de rehabilitación The Priory para ser tratado por su abuso del alcohol.