Medio ambiente ya repara los daños por temporales en las cuencas de ebro, cantábrico, duero y miño-sil


El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente trabaja ya en ejecutar 71 actuaciones repartidas en 16 provincias para reparar los daños en el dominio público hidráulico causados por los temporales de entre finales de enero y principios de marzo en las cuencas del Ebro, el Cantábrico, el Duero y el Miño-Sil.
Estas actuaciones se están acometiendo en las comunidades autónomas de Aragón, Asturias, Cantabria, Castilla y León, Galicia, La Rioja y Navarra, y cuentan con una inversión de seis millones de euros, según informó este viernes el departamento dirigido por Isabel García Tejerina.
Los trabajos, ejecutados a través de la Dirección General del Agua, se enmarcan en el real decreto-ley aprobado por el Gobierno el pasado 6 de marzo en medio de importantes crecidas en la cuenca del Ebro, con el que Medio Ambiente preveía destinar 70,1 millones de euros a reparar los daños ocasionados por los primeros temporales del año, 43,5 millones de ellos para corregir las afecciones en el dominio público hidráulico.
Las primeras obras ya ejecutadas o en ejecución se distribuyen entre las demarcaciones hidrográficas del Duero (2,33 millones de euros en 27 actuaciones), el Ebro (2,17 millones en 31 trabajos), la del Miño-Sil (1,08 millones en 6 proyectos) y la del Cantábrico (0,41 millones en 7 actuaciones).
En las próximas semanas, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente comenzará a ejecutar otras 44 nuevas actuaciones por un importe de 1,5 millones de euros para seguir reparando los daños causados por estos temporales en las cuencas del Ebro (1.147.880 euros en 24 trabajos), el Cantábrico (218.000 en 18 actuaciones) y el Duero (150.000 en 2 proyectos).
El objetivo de estas 115 primeras actuaciones es restaurar y reparar los daños causados por las avenidas tanto en las infraestructuras hidráulicas como en las márgenes de los ríos; ejecutar la limpieza, retirada de tapones y reparación de desagües, colectores, sifones y drenajes para evitar que se puedan producir nuevas retenciones de agua que puedan provocar nuevos desbordamientos, y restaurar los paseos fluviales que hayan resultado dañados.
Medio Ambiente, que ha detectado daños en más de 700 puntos de las cuencas afectadas, comenzó los trabajos unos días después de producirse las inundaciones en las zonas en las que el terreno permitía la entrada de máquinas. Los trabajos se han ido realizando en paralelo a las visitas de los técnicos a las zonas afectadas para valorar las afecciones producidas.

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