Miles de personas desafían al frío y a la lluvia para presenciar el Encuentro en León

León.- El acto más emotivo de la Semana Santa leonesa ha congregado hoy a miles de personas en la Plaza Mayor, a pesar del frío y de la amenaza de lluvia, para presenciar el llamado Encuentro, el momento en el que los cofrades del Dulce Nombre de Jesús Nazareno enfrentan a las tallas de San Juan y La Dolorosa, ante la imagen del Nazareno.

Se trata de uno de los momentos más espectaculares de la Pasión leonesa que, además, cuenta con una mención especial dentro de la declaración de la Semana Santa de Interés Turístico Internacional.

Más de 1.200 braceros han pujado las 13 tallas que se procesionan en este desfile de la Semana Santa, también llamada de Los Pasos, el más largo de la Pasión Leonesa, ya que ha comenzado a las 7.30 de la mañana de la iglesia de Santa Nonia y ha realizado un recorrido por las escenas del Vía Crucis.

Una hora después, sobre las 8.30 horas, hacía su entrada el primero de los pasos que se portan en esta procesión para, posteriormente, uno a uno y por ambos lados de la plaza, los cofrades ir haciendo llegar todas las tallas hasta el recinto, donde ya esperaban desde primera hora de la mañana miles de personas.

Poco antes de las diez de la mañana se ha producido el momento más destacado, como cada año, el Encuentro entre las imágenes de San Juan y La Dolorosa, bajo los aplausos emocionados de los asistentes, que han esperado durante horas, bajo un intenso frío y un cielo nuboso, la genuflexión del Santo ante la Virgen.

Mientras tanto, se ha producido otra de las imágenes más características de esta semana de pasión, el baile del resto de los pasos provocado por el movimiento de los cofrades al son de las saetas de las bandas de música que han participado en la procesión.

Desde el balcón del viejo edificio consistorial de la ciudad, la corporación municipal, con el alcalde de León, Francisco Fernández (PSOE), a la cabeza, ha estado contemplando en este lugar privilegiado el tradicional Encuentro.

Junto a ellos, veinte leoneses que resultaron agraciados en el sorteo que cada año organiza el Ayuntamiento de León mediante el que se pretende dar la oportunidad a un grupo de vecinos de poder contemplar este momento de la Semana Santa desde este balcón.

Y es que, durante estos días, las ventanas de los edificios que dan a la Plaza Mayor se cotizan alto e, incluso, en el hotel ubicado en esta misma plaza, la noche del Jueves al Viernes Santo llega a costar hasta 600 euros, con el plus de poder observar desde sus ventanas este emotivo momento.

Unos veinte minutos más tarde, la procesión ha continuado su trayectoria a través de la calle Mariano Domínguez Berrueta, para recorrer el centro de la ciudad, realizar el tradicional descanso en la plaza de Santo Martino, y terminar, de nuevo, en su punto de origen, es decir, la iglesia de Santa Nonia.

Esta procesión de los pasos está formada por las tallas de la Oración del Huerto, el Prendimiento de Jesús, la Flagelación, la Coronación, Jesús ante Pilatos, Jesús con la Cruz a cuestas, Verónica, Expolio, Exaltación de la Cruz, Crucifixión con María Magdalena, Cristo de la Agonía, San Juan y la Dolorosa.

La Hermandad del Dulce Nombre de Jesús Nazareno es una cofradía exclusivamente masculina, y es la más numerosa de las que existen en León, ya que cuenta con más de 4.000 hermanos.

Sin embargo, la procesión de los Pasos destaca por que la pasada medianoche celebra La Ronda, momento en el que varios hermanos de la cofradía, con esquila, clarín y tambor, llaman al resto de los hermanos y a los leoneses a participar en la procesión.

Enlutados en sus respectivas túnicas, han recorrido la pasada madrugada las calles de la ciudad, realizando paradas en lugares específicos como el Ayuntamiento de San Marcelo o el Palacio de los Guzmanes, donde entonaron el célebre "levantaos, hermanitos de Jesús, que ya es hora".

Una vez realizado el recorrido, como es tradición, los hermanos encierran al abad de la cofradía en su casa a toque de ronda que, al alba, es de nuevo recogido por los miembros de la cofradía para dar comienzo a la procesión.