Osama, el panadero marroquí muerto en el brutal choque de la M-50 en Navidad

Tres jóvenes de unos 20 años fallecieron y otro de la misma edad resultó  herido de gravedad en un brutal accidente de tráfico en la M-50, durante la Nochebuena, cuando el vehículo en el que viajaban se salió de la calzada y circuló sin control durante más de 50 metros por la cuneta.

Con el paso de las horas se conocían algunos detalles, como que todos los implicados eran de origen marroquí y vecinos de Rivas-Vaciamadrid. Uno de los identificados se llamaba Osama, tenía apenas 23 años y trabajaba como panadero.

Según recogió Telemadrid de familiares de la víctima, el hombre estaba cenando con su mujer y su hermana cuando decidió salir a tomar algo con unos amigos, pero nunca volvió. Osama, que trabajaba con su padre en una repostería-panadería muy cerca de Barajas, era el menor de siete hermanos y ha dejado huérfano a un niño de cuatro años. 

La familia estuvo tratando de hablar con él llamándole al móvil durante horas al ver que no volvía, hasta que temiéndose lo peor decidieron contactar con la Policía. Este miércoles por la mañana han acudido al Anatómico Forense donde le han identificado gracias a una fotografía.

Llamadas al 112

Según informó a Efe un portavoz de Emergencias Madrid, el accidente tuvo lugar hacia la una de esta madrugada a la altura del kilómetro 37 de la M-50, cuando el turismo ocupado por los cuatro jóvenes se salió de la calzada y circuló sin control por la cuneta durante más de 50 metros, arrastrando el guardarrail a su paso. Fuentes de Emergencias Madrid señalaron que antes de producirse el suceso se habían recibido algunas llamadas alertando de que un vehículo estaba circulando a gran velocidad en el lugar donde después ocurrió el suceso. Al parecer el coche se ha salido de la calzada y ha derrapado por 50 metros. Todo indica que se trata de un exceso de velocidad.

Como consecuencia del brutal impacto, tres de los ocupantes del turismo murieron en el acto, mientras que el cuarto resultaba herido y tenía que ser rescatado por los bomberos del Ayuntamiento de Madrid del interior del coche, ya que se encontraba atrapado por el amasijo de hierros.

Posteriormente, los Bomberos extrajeron del interior del vehículo los cadáveres de dos de los tres jóvenes fallecidos pues el tercero había salido despedido como consecuencia del impacto, que dejó el coche convertido en un amasijo de hierros. La Guardia Civil se encargó de realizar el atestado y de iniciar las pesquisas para conocer las causas del siniestro.