Mujeres españolas se hacen "socias" de mujeres indias apoyando sus negocios

Madrid, 27 nov.- Una iniciativa de la Fundación Vicente Ferrer propone que una mujer española invierta 9 euros al mes en el "pequeño negocio" de otra mujer que vive en la India a fin de romper la situación de exclusión y marginalidad que vive en su comunidad, reforzando su autonomía personal.

Esta fundación ha puesto en marcha la campaña "De Mujer a Mujer. Sociedad Cooperactiva", que cuenta con el apoyo de mujeres españolas conocidas como la periodista Ana Pastor, la nadadora paralímpica Teresa Perales, la cantante Luz Casal y las actrices Maribel Verdú y Blanca Portillo, entre otras.

"Son aportaciones demasiado sencillas en España, pero a ellas les transforma la vida", ha explicado la deportista paralímpica que viajó a la India para conocer el proyecto y que reconoce que le ha encantado "ver la cara de su socia y su sonrisa".

"Tengo una empresa que puede ser la más importante de mi vida. Te deja una huella en el corazón", ha añadido Perales.

Su socia tiene 28 años, tres hijos y perdió una pierna en un accidente. Con la aportación de la solidaria deportista se ha comprado una búfala. Casi la mitad de las mujeres de la India rural vive por debajo del umbral de la pobreza y sufren múltiples discriminaciones -de género, casta, discapacidad- o son víctimas de matrimonios precoces o de abortos selectivos.

"Es un buen momento para que las mujeres españolas e indias unan sus manos para tejer una sociedad más justa y un mundo mejor", ha planteado la presidenta de la Fundación Vicente Ferrer, Anna Ferrer.

Ha relatado los cambios que se han producido en la población de ese país, donde vive desde hace 43 años, en el que hay democracia pero "muchas leyes no se aplican" y se mantienen discriminaciones para las mujeres, como la de "no poder tener propiedades" o los matrimonios infantiles.

"Las mujeres eran las esclavas de la familia y de sus comunidades; no eran las pobres, todos los eran, sino las esclavas en una sociedad patriarcal, en la que los hombres tenían el poder", recuerda.

A pesar de los cambios, ha destacado que un censo realizado por el gobierno de ese país en 2011 registró "la desaparición de seis millones de chicas por abortos selectivos e infanticidio".

Con la contribución mensual de la solidaria o solidario español, el 60 por ciento se destina a abrir una cuenta bancaria a nombre de cada mujer y a los siete años se convierten en propietaria de una cuantía que "les permite no sólo ganarse el respeto de sus familias y de la comunidad, sino que garantiza su autonomía y seguridad de futuro".

La otra parte se destina a educación, sanidad o vivienda, para fortalecer el papel activo de las mujeres en la sociedad y conseguir que sus maridos y vecinos les respeten y les permitan participar en la toma de decisiones de la comunidad.

Las mujeres deciden cómo emplear esos ahorros, asesoradas por la Fundación Vicente Ferrer, que les anima a comprar animales o a abrir pequeños negocios, como un quiosco de una tienda de comestibles.

"Las mujeres españolas, que tienen una vida justa, son las mejores colaboradoras para que ellas también la tengan", ha asegurado la presidenta de la fundación, que se ha marcado el objetivo de crear la red solidaria de mujeres más grande del mundo.