"Durante la Olimpíada no tenemos preocupación sobre el agua, el gobierno federal está haciendo una obra llamada 'back-up' en el reservorio Paraibuna (...) para tener una reserva [en] caso [de que] tengamos una sequía acentuada el año que viene", informó la responsable en un evento sobre medio ambiente.
La reserva de Paraibuna, la más grande en la cadena que abastece a Rio de Janeiro, está llegando a su "volumen muerto", en el que el agua restante no puede ser usada. En total, los cuatro principales reservorios de la red Paraiba do Sul cayeron este mes a menos de 6% del "volumen activo".
Las autoridades de Rio sostienen que el estado sufre "la peor sequía en 85 años", pero Teixeira indicó que los servicios de meteorología prevén que no continuará en 2016.
"Es una obra de carácter preventivo. Bombas de reservas que tienen 2.000 millones de metros cúbicos (...). No va a faltar agua", reiteró.
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