Jerusalén, 28 ago.- Nueve adolescentes israelíes, ocho de ellos menores, han sido imputados hoy por el intento de linchamiento de un palestino hace dos semanas en pleno centro de Jerusalén, en el que participó medio centenar de personas que gritaban "Muerte a los árabes".
Según el pliego de acusación presentado hoy en el Tribunal de Distrito de Jerusalén, dos chicas participaron en la brutal paliza, que dejó al adolescente palestino en estado grave y generó un intenso debate en Israel sobre el racismo juvenil.
La Policía, que les atribuye presunta incitación, llamamiento a la violencia y asalto con motivación racista, ha pedido la prórroga de su encarcelamiento provisional, salvo para una chica de quince años que ha sido destinada a arresto domiciliario.
El intento de linchamiento tuvo lugar el pasado día 16 cerca de la medianoche en la concurrida plaza Sión, en el corazón de la parte judía de la ciudad.
Allí se desplazaron unas treinta personas con el objetivo de "pegar árabes" después de que una chica les dijese en una plaza cercana que un palestino le había acosado sexualmente, según el texto de la imputación.
El grupo vio primero a un árabe que no conocía y trató de atraparle, pero éste huyó.
Minutos después, intentaron atacar a otros cuatro palestinos que pasaban por la zona: Tres lograron escapar, pero uno, Yamal Yulani, de 17 años, tropezó y comenzó a ser golpeado por la turba hasta perder el conocimiento.
El palestino recibió primeros auxilios en el lugar y fue trasladado en estado grave al Hospital Hadasa de la ciudad, donde se ha ido recuperando de sus heridas y recibió el alta el pasado jueves.
"No recuerdo nada de lo sucedido ni puedo entender de qué habla la gente. Todo lo que recuerdo es que salí a comprar ropa para el fin del Ramadán y me desperté en el hospital", dijo entonces.
Yulani recibió la visita del presidente del Parlamento, Reuven Rivlin, que definió lo sucedido como un "microcosmos de un problema nacional que puede poner en peligro la democracia israelí".
La paliza se produjo la misma noche en que presuntamente tres colonos judíos religiosos de entre doce y trece años de edad hirieron a seis palestinos, dos de ellos de gravedad, al lanzar un cóctel molotov contra el taxi en el que circulaban por el territorio ocupado de Cisjordania.
El domingo, la Policía israelí arrestó a los sospechosos en el asentamiento de Bait Ayin, situado cerca de Belén, a partir de una prueba hallada en el lugar de los hechos.
Un viceprimer ministro israelí, Moshe Yalon, calificó el lanzamiento del cóctel molotov de "ataque terrorista" que vulnera la "moral y valores judíos".
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