Oxfam pide al gobierno haitiano que frene el cólera con más agua potable e instalaciones sanitarias


Oxfam (Intermón Oxfam en España) reclamó este viernes al Gobierno de Haití que garantice el acceso a las instalaciones sanitarias y el agua potable para frenar el avance del cólera en el país.
Esta organización advirtió de que los brotes de cólera continuarán en Haití mientras gran parte de la población no disponga de agua potable y servicios de saneamiento.
"Oxfam puede dar una respuesta de emergencia, pero necesitamos que el gobierno nacional, con el apoyo de la comunidad internacional, mejore el acceso a las instalaciones sanitarias y al agua potable, tanto en las zonas rurales como en las urbanas", afirmó la portavoz de Intermón Oxfam, Helena Vidal-Folch.
La epidemia ha brotado nuevamente en zonas altamente pobladas de Haití, donde la defecación al aire libre es común porque hay pocas letrinas y poco espacio disponible para construir nuevas.
"Los haitianos son más conscientes ahora de cómo se contagia el cólera, cómo deben protegerse y qué hacer en caso de mostrar síntomas. La prevención de cólera es simple: Basta con beber únicamente agua potable y tener buenos hábitos de higiene. Y aunque la población lo sabe, es muy difícil seguir estas recomendaciones sin tener servicios básicos", añadió Vidal-Folch.
El último brote de cólera se ha dado en la población de Carrefour, al sur de la capital haitiana, Puerto Príncipe. Mientras que el pasado mes de noviembre, cuando hubo los primeros contagios, se registraron un máximo de 900 casos a la semana, actualmente las agencias de salud se enfrentan a más de 300 casos diarios.
Vidal-Folch señaló que el cólera es "endémico ya" en Haití, de forma que, a su modo de ver, "seguirán surgiendo brotes mientras el acceso a los servicios sociales básicos no tienda a universalizarse".
En coordinación con las autoridades locales y otras agencias internacionales que trabajan en Carrefour, Oxfam ayudará a unas 70.000 personas con distribuyendo pastillas de cloración, desinfectando viviendas en las que se han detectado casos de cólera y llevando a cabo actividades de promoción de higiene.
Estos nuevos beneficiarios se añadirán a las 77.000 personas desplazadas en campos a las que Oxfam ya estaba ofreciendo servicios de agua y saneamiento.
Oxfam subrayó que la mitad de la población urbana y el 80% de la población rural no tenía acceso a instalaciones sanitarias básicas antes del terremoto de enero de 2010, y que actualmente unos 680.000 desplazados siguen viviendo bajo tiendas y lonas.

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