Pamplona homenajea hoy a su patrón, San Saturnino

  • Pamplona.- Pamplona celebra hoy la fiesta de su patrón, San Saturnino, y lo hará con la tradicional procesión a la que asiste el Ayuntamiento en cuerpo de Ciudad acompañado por el cortejo del que formará parte la Comparsa de Gigantes y Cabezudos en el año de su 150 aniversario.

Pamplona homenajea hoy a su patrón, San Saturnino
Pamplona homenajea hoy a su patrón, San Saturnino

Pamplona.- Pamplona celebra hoy la fiesta de su patrón, San Saturnino, y lo hará con la tradicional procesión a la que asiste el Ayuntamiento en cuerpo de Ciudad acompañado por el cortejo del que formará parte la Comparsa de Gigantes y Cabezudos en el año de su 150 aniversario.

Junto a ellos guardias municipales de gala, txistularis, dantzaris, timbales y clarines, el cabildo catedralicio, la bandera municipal con porta bolas, maceros y libreas, y la Pamplonesa arroparán la imagen de San Saturnino por las calles.

A las once de la mañana está prevista en la parroquia del patrón la misa en su honor que presidirá el arzobispo Francisco Pérez y en la que intervendrá la Capilla de Música de la Catedral.

A su término la Corporación regresará al Ayuntamiento donde la Comparsa bailará acompañada por dantzaris y txistularis.

El programa festivo continúa por la tarde con un concierto extraordinario de La Pamplonesa en el Teatro Gayarre.

Fue el 26 de noviembre de 1611 cuando el Ayuntamiento de Pamplona designó a San Saturnino patrón de la ciudad por la labor evangelizadora que hizo en la capital Navarra, y el acuerdo incluyó el mandato de celebrar cada 29 de noviembre una procesión solemne y una misa.

Obispo de Toulouse, la tradición dice que San Saturnino visitó Pamplona y llegó a bautizar a 40.000 personas con el agua del pozo existente frente a la actual parroquia, uno de los primeros Fermín, consagrado primer obispo de Pamplona después de evangelizar por tierras francesas.

Hacia el año 250 San Saturnino murió en Toulouse atado con una soga a un toro que loa arrastró hasta ser descuartizado.

El culto a este mártir se intensificó en Pamplona a partir del siglo IX como consecuencia del paso de los peregrinos jacobeos a Compostela.

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