Partidarios de líder centroafricano levantan controles para detectar rebeldes

  • La Coalición Ciudadana de Oposición a las Rebeliones Armadas (COCORA) desmantelará hoy los controles en las calles de Bangui instalados para detectar a sospechosos de colaborar con los insurgentes, informaron a Efe dirigentes de esa alianza leal al presidente centroafricano, François Bozize.

Bangui, 6 ene - La Coalición Ciudadana de Oposición a las Rebeliones Armadas (COCORA) desmantelará hoy los controles en las calles de Bangui instalados para detectar a sospechosos de colaborar con los insurgentes, informaron a Efe dirigentes de esa alianza leal al presidente centroafricano, François Bozize.

La colocación de estos controles fue ordenada a esta formación de jóvenes por Bozize, quien se enfrenta desde el mes pasado a una sublevación en el norte del país de la coalición rebelde Seleko, que ya ha tomado doce ciudades y ha llegado a 160 kilómetros de la capital.

La decisión de levantar estas barreras se produce a dos días del inicio de las conversaciones entre el Gobierno y los rebeldes en Libreville, que se celebrarán pese a que ayer los sublevados tomaron otras dos ciudades, una semana después de que anunciaran que detenían su ofensiva.

"Las barreras serán desmanteladas esta tarde y los jóvenes regresarán a sus distritos para establecer comités de vigilancia para detener a los sospechosos de desestabilizar nuestro país", dijo a Efe Vené Faimindi, uno de los líderes de COCORA.

Estos controles han sido muy criticados por la población y por instituciones internacionales, ya que varias fuentes aseguran que los jóvenes aprovechan esas barreras para llevar a cabo robos y detenciones arbitrarias.

El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) denunció la semana pasada que hay menores de 18 enrolados en COCORA, una acusación rechazada por sus líderes, que la califican de gratuita y sin base.

Bozize pidió en diciembre a los jóvenes que se movilizaran para parar el avance de los "mercenarios extranjeros que quieren desestabilizar la República Centroafricana", en un momento en que los rebeldes amenazaban con tomar la capital, Bangui.

Rebeldes y representantes del Gobierno deben reunirse el martes próximo en la capital de Gabón para negociar el fin de la sublevación, como ha pedido el Consejo de Seguridad de la ONU.

Los insurgentes exigen a Bozize que cumpla los acuerdos de paz firmados en 2007, los cuales contemplan la integración de los combatientes rebeldes en el Ejército centroafricano, la liberación de una serie de prisioneros políticos y la asignación de subvenciones a los milicianos sublevados que optaron por el desarme.

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