Rebeldes centroafricanos llegan con retraso a Gabón a negociar con gobierno

Bangui, 6 ene - La delegación de los rebeldes centroafricanos llegará el lunes a Libreville para negociar este lunes, un día después de lo previsto a causa de un problema técnico en el programa de vuelo del avión de la ONU que debía trasladarles, según pudo saber hoy Efe.

"Ha habido un problema con la autorización de vuelo del avión, que no ha podido despegar, y el vuelo ha sido pospuesto al lunes", dijo a Efe una fuente de la sección de información de la ONU en la República Centroafricana (RCA).

Los representantes del Gobierno llegarán a Libreville, la capital de Gabón, también el lunes, informó telefónicamente el número dos de la delegación oficial centroafricana Cyriaque Gonda.

"Esperamos partir hacia Libreville el lunes", dijo asimismo Joseph Bendounga, representante del tercer actor de la negociación, la oposición reconocida por el Gobierno de Bangui.

El presidente, Francois Bozize, llegará a Libreville más tarde, en tanto que autoridad máxima de la República, explicó una fuente cercana a la Presidencia.

La coalición rebelde Seleka, que inició su sublevación en el norte del país en diciembre y ya ha tomado doce ciudades, pide la dimisión de Bozize, al que acusa de no cumplir los acuerdos de paz alcanzados con ellos en 2007.

Sin embargo, la salida de Bozize no será uno de los temas que estén sobre la mesa durante las negociaciones.

Los rebeldes están estacionados a 160 kilómetros de la capital, Bangui.

Pese a haber anunciado el cese de su ofensiva el 29 de diciembre, la coalición sublevada tomó dos nuevas ciudades ayer, justo después de que el Consejo de Seguridad de la ONU les llamara a detener la ofensiva.

Los acuerdos alcanzados en 2007 entre el Gobierno y los cuatro grupos que forman Seleka prevén la incorporación de los rebeldes al Ejército de la RCA, la liberación de algunos presos considerados políticos y el pago de subvenciones a los milicianos que dejaron las armas.

También hoy, la Presidencia de Sudáfrica anunció su visto bueno al envío a Bangui de 400 soldados sudafricanos, que se sumarán a los más de 500 soldados de la Fuerza Multinacional en África Central (FOMAC) ya desplegados en torno a la capital centroafricana para evitar el avance de los rebeldes.