Renfe pide responsabilidad a sindicatos y dice que liberalizar creará empleo

Santander, 5 sep.- El presidente de Renfe, Julio Gómez-Pomar, ha llamado hoy a los sindicatos ferroviarios a la "responsabilidad y al diálogo" en torno a la liberalización del sector que, a su juicio, mejorará la calidad del servicio y "traerá más empleo, innovación y nuevas oportunidades".

Así lo ha señalado en su intervención en un curso sobre infraestructuras de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), en el que ha analizado el futuro de la compañía ante el nuevo escenario de liberalización que se abrirá en España en julio de 2013.

Gómez-Pomar ha defendido las ventajas que supone la liberalización y ha puesto los ejemplos de otros ámbitos previamente liberalizados, como los servicios postales o de telefonía, en los que, según dice, ha aumentado el empleo y las oportunidades, "al contrario de lo que plantean los sindicatos ferroviarios".

El presidente de Renfe ha mostrado la voluntad de la compañía de desarrollar este proceso desde el diálogo y el respeto a los trabajadores y profesionales de la empresa, ha confiado en conseguir superar todas las dificultades y ha pedido responsabilidad a los sindicatos.

En este sentido, Gómez-Pomar ha recalcado que las huelgas en sectores públicos de transporte "dañan gravemente" la economía, "perjudican" a los usuarios y, además, "no tienen mucho sentido", como "ponen en evidencia" las experiencias vividas en otros sectores.

El presidente de la compañía ferroviaria ha resaltado que Renfe va a seguir siendo un operador clave en España y también estará presente en otros mercados, como los de Arabia Saudí, Brasil o Rusia.

Ha asegurado que la liberalización será beneficiosa para los ciudadanos, porque redundará en una mejora del servicio público y en mayor eficiencia, ya que obligará también a la propia Renfe a mejorar su servicio para competir con otras empresas.

Además, ha señalado que permitirá abaratar los costes al mismo tiempo que se mejoran los estándares de calidad y se mantienen los niveles de inversión.

Gómez-Pomar ha dejado claro que liberalizar el sector no es lo mismo que privatizarlo y ha añadido que la liberalización no debe verse como un fin en sí mismo, sino como un medio para mejorar la eficiencia a través de la competencia.

Ha reconocido que la liberalización del sector no atraerá a un número "excesivo" de empresas, porque el mercado ferroviario "admite muy pocos competidores" y "no hay sitio para demasiados". Y ha afirmado que para mejorar el servicio es preferible que la competencia venga de empresas privadas.

El presidente de la empresa ha destacado que Renfe debe prepararse para competir en este nuevo mercado y en esa línea se estructurará en torno a cuatro sociedades mercantiles encargadas de las distintas áreas de actividad, una de ellas, novedosa, la que se encargará de alquilar vehículos a las compañías que entren en el mercado.

El Ministerio de Fomento, por su parte, tiene por delante una tarea que, según el presidente de Renfe, "no es sencilla": la de concretar cómo se liberaliza el sector, si se licitan concesiones de líneas o corredores, y cómo se combina todo esto teniendo en cuenta las diferencias que hay entre las líneas comerciales y las consideradas de servicio público, que son deficitarias y dependen de las subvenciones para su mantenimiento.